Mi Homenaje a Cebrián

Yo solo puedo decirte gracias..y que siento muchísimo que te fueras…tan pronto… recuerdo que lloré mucho…sentí rabia…lo escuché en directo y no podía creerlo… Era fantástico escucharte, tus historias… tus pasajes… era como ver una película con los ojos cerrados…a todos les hablaba de ti y de tu programa…qué injusta es la vida… Gracias por hacernos viajar, por recrear aquellos momentos épicos…por la pasión y verdad que ponías en todo… Un abrazo a tu familia, colegas y amigos… Y no dudes, que el que te escuchó y leyó, no podrá olvidarte.

Un martes cualquiera a las 16 horas. Trabajo. Estoy compilando un trozo de código para un programa informático. Números, letras, símbolos… Me llega un correo a mi cuenta personal. Es de la Asociación JAC. Miro el video. Me remonto a 1992, 1996, y 2000 y 2004 y 2007… a aquella noche horrible… Pero tantas otras gloriosas… tantos programas fantásticos, tantas noches de radio. Nunca he sido mitómano ni he pedido autógrafo alguno a nadie. Pero si hubiera que haberlo sido de alguien no se me ocurre mejor persona que el Cebtri. Vaya, creo que me están cayendo dos lagrimones. No, no lo creo.. es así… Es completamente cierto que Juan Antonio sigue vivo en el recuerdo de miles de personas. Yo todavía sigo escuchando algún programa antiguo de vez en cuando, en el metro camino de casa, a plena luz, pese a que me sé de memoria el comentario sesudo de Carlos Canales o el espía de turno de Fernando Rueda, o el asesino en serie de Cebrián… y es como volver a aquellas madrugadas tan lejanas como fantásticos.

Juan Antonio (con todo el respeto, Silvia) Ya iba siendo hora de decírtelo. Sobre 2007 descubri tu selección de pasajes de la historia, que me acompaña, junto con el programa RV completo, todos los días en coche desde entonces durante 1 o 2 horas en Madrid, y en casa. Ahora estoy en la tercera vuelta de audición de tus pasajes y “versus” (¡Todos!). Y voy en 2008 en la RV (yendo hacia atrás…). Lo he comentado y compartido con amigos y colegas de trabajo muchas veces (y escuchando tu podcast de Nuñez de Balboa mientras escribo) Gracias. Si. Nunca me gustó mucho la historia de joven, pero desde que te oí en los pasajes del Baron Rojo o El Paso de las Termópilas (favoritos) y el resto claro…, no te dejo, y leí ademas tu libro de los Romanos en España. Mi hija Eva también te conoce. Con 8 años me oye hablar de la vida de los grandes (de tu parte), y le he comprado biografias como El Cid, Churchill, Marie Curie, Alejandro, El Baron, personajes de las Termópilas… ¿Sabes?: Me encanta oirte decir “el siete veces cónsul Mario”; y cuando hablando de Quiroga con Calleja comentas en broma lo del disgusto del amigo muerto por accidente con escopeta -te juro que lo he oído más de 20 veces, o las salidas peligrosas de Fernando por puertas con trampa en monograficos espías.. Genial. Tu si Mereces un pasaje por hacernos Amar la historia, maestro. ¡Como me gustaría haberte conocido!…

Versos libres a Juan Antonio Cebrián

Él era feliz como una lombriz
delante del micrófono.

Supongo que apenas sospechaba
que detrás del auricular
otros muchos compartíamos su felicidad.

Esa voz potente y sincera se empeñaba
en llenar de sueños los sueños,
las noches de misterios,
en alimentar la mente del curioso
que roba horas a la noche.

Su voz recrea aún pasajes de la historia
en mis oídos.

Su voz me trae las espadas, el fuego, el misterio,
heroínas, caballeros, villanos, guerreros poderosos,
leales, tiranos, condenados, científicos…

Un día,
su voz contestó a mi pregunta adolescente:
¿se puede hacer un viaje astral?

Era la sintonía medievalesca la que anunciaba
un nuevo paseo nocturno por la aventura del saber,
la que entraba hacia mis neuronas gritando:
¡Preparaos para imaginar! ¡Allá vamos!

No he dejado de oírle.
No ha quedado en la alacena de la memoria.
No he dejado de leerle.
Está vivo en sus oyentes y en su programa.

Que tu rosa de los Vientos siga llevándote
a aguas tranquilas, a lugares que sacien tus inquietudes,
a Alejandría, a India, a Isla de Pascua…
Allí nos vemos, allí nos escuchamos.

Carlos Fernández-Alameda
20-Octubre-2014
Camino de Ávila a Madrid, escuchando Pasajes de la Historia

Como decían en cierta película, “La luz que brilla con el doble de intensidad dura la mitad de tiempo. Y tú has brillado con mucha intensidad, Juan Antonio.”

Sea como fuere, tu recuerdo y tu legado siguen tan vivos, que esa luz aún brilla con fuerza por aquí.

Mario Sierra Sanz.

Mi homenaje a ti, hoy, el día que falleciste es sencillo.

Han pasado 7 años y te sigo recordando, escuchando y hablando de ti con los amigos. Ya no eres un hombre, ahora eres historia y leyenda.

Gracias por darme tanto, a quien tampoco te dio.

Patxi.

Cada fin de semana te añoramos Maestro Juan Antonio Cebrián. Tu Fuerza y Honor sigue vigente.

Esperando a que empezara el programa, esperando la tertulia de las 4 C, esperando los pasajes de la historia…sin palabras.Como cuando monté en aquel taxi en Benidorm en el 2002 y el taxista estaba escuchando La Rosa y le dije -Ehh, yo también escucho La Rosa de los Vientos!! Y me dijo -Si, pero Juan Antonio está de vacaciones…

Me cautivó su voz, su gran destreza en la comunicación de todos esos contenidos que tanto nos apasionan, sobre todo los pasajes de la historia. Me quedé con una pregunta que nunca hice acerca de la sociedad teosófica en España. No importa, seguro que tus amigos ya lo habrán comentado en alguna ocasión. Simplemente siempre la recordaré; su voz.

Me gustaría trasladarte la fuerza y el honor que me infundías aquellas noches de estudiante, duras, muy duras por diversos avatares más allá de la pura formación académica. Sigo recordando como descansaba escuchándote y me sentía acompañado por todos aquellos que comunicábáis y otros que escuchában. Pensábamos y sentíamos igual. Aunque el recuerdo es triste, sólo puedo recordar lo pasado, me siento privilegiado de haber recorrido juntos el turno de noche hasta la rosa de los vientos pasando por la revista que llenó un vacio temporal inexplicable. Este privilegio, ahora ya padre, trato de infudirlo a mis hijos donde los cuentos de guerreros y héroes, tus pasajes de la historia, siguen estando presentes. Triste pero con la fuerza y honor que nos enseñaste.

He sido tan feliz escuchando la “HISTORIA” y leyéndola gracias a tus trabajos que no hay homenaje posible a la altura de tu grandeza. Solo espero que para cuando vaya “pa allá” estés “radiando”como tú sólo sabes, la Historia que tanto nos gusta . No te olvidamos.

En una ocasion,perdido,en la vida se me abrio la puerta al escuchar por primera vez al profesor argumusa con aquella voz tan peculiar ,salida desde ulratumba ,y lo digo con conocimiento de causa, porque tenia que encender la luz de mi habitacion ,asutado confundiendo la voz del profesor con alguna de sus sicofonias ,impresionante la verdad.Era increible ,Los pasajes de la historia,el programa duraba 5 horas que dura hoy tanto tiempo,nose.gracias de verdad he crecido contigo y he avanzado com mejor persona de verdad.

Siendo arabe y musulman que soy y escuchando el Monografico sobre Saladino , me di cuenta que Juan Antonio Cebrian , era un Periodista Imparcial, no se vendia a nadie.

La imparcialidad, escasea entre los que utilizan la pluma, en la actulidad.

Escuchar sus programas , insufla esperanza en el mañana y crean me es como leer enciclopedias.

Es una gran perdida.

Saludos a los que componen la asociacion

Con este homenaje quiero expresar que no olvidaré la voz de Juan Antonio Cebrián. Escuchaba sus programas desde que iba al colegio y de eso hace mucho. Me ha reconfortado muchas veces, cuando no podía dormir oir sus pasajes de la historia y los misterios… Un abrazo muy grande.

Era una noche. Esa noche. Bendita noche. Esa que era más limpia y clara que el mejor de los días cuando tu voz surgía de las ondas. La noche en la que eras el Rey, eras el más importante General de los ejércitos de las ondas, eras el ojo vigía que cazaba misterios de entre cada rincón del mundo, eras la pluma con la que ellos escribían sus obras maestras, el escudo de los grandes guerreros de la historia, los ojos del cuervo de Allan Poe, la triste cama de Ana Frank, la pesada espada de William Wallace, eras Babieca y Bucéfalo, eras el pincel de Miguel Ángel, la pluma de Cervantes y Shakespeare, eras el anillo de emperador de Caligula, el casco de Aníbal, eras la fuerza de Viriato, eras el pájaro que desde las alturas veías las grandes batallas, eras eso y mucho más. Todo ello y todo lo demás. Era una de esas noches, en coche, por tierras manchegas, por tus tierras manchegas, casi llegando a Jaén. Era la madrugada del 21 al 22 de septiembre de 1.999. Ese año conocí las dos personas que más me han hecho crecer. Mi mujer y tú. Recuerdo que hablabas con Fernando de las microfichas. Empezaba una nueva temporada y aquella noche me enganchaste. Me cogiste del alma y aun hoy la tienes agarrada tan fuerte que no se escapa de dentro de mi en tu busca porque eres tu el que la retienes. Bendita noche, bendito mes, bendito año.

Has hecho que crezca, que crezca tanto que ahora tú mismo te sentirías orgulloso de mí. Te sentirías tan henchido que no cabrías en ti mismo, pero tu no eras así. Tu eras algo más, tu tenías otro sentido que los demás mortales aun no hemos desarrollado. Tenías la virtud de siempre estar dando y no pedir nada a cambio. Eras sincero, simple, un tipo del que todos queríamos ser amigo. Yo me imaginaba sentado a tu lado escuchando tu voz, aprendiendo de ti porque cada palabra que salía de tu boca era lección a aprender. Me imaginaba en la Fuente del Avellano a tu lado. De hecho ahora que ya estas con Dios seguro que él mismo te reúne a su lado para aprender de ti. Para que le alegres las noches, para que alecciones a tantos y tantos seres vulgares que hay donde tu ahora estás. Y es que los genios como tu corren el riesgo de ser imprescindibles. Y tanto lo eras tu que hasta el mismo Dios te ha llevado a su lado para que estés con él. No resistía mas sin tenerte para él. Ese es el riesgo de ser el mejor. Ahora cada noche espero que, como tantas historias que has contado y narrado, aparezcas y nos des aquello que nos dabas.

En cada amigo que dejas hay una historia o varias. En cada mejillón que ahora nos quedamos sin concha has puesto no un granito sino una inmensidad de arena en lo que somos. Gracias a ti somos personas, mejores personas.

Ahora me pongo en el lugar de Silvia y Alejandro y pienso que si nosotros que solo estábamos contigo unas pocas horas a la semana te echamos tanto de menos y nos has dado tanto, ellos que te tenían cada día a cada hora no podrán soportarlo. Pero la grandeza se mide, no por las veces que uno cae sino por las que uno se levanta y Silvia con la ayuda del pequeño Alejandro sabrá ponerse de pie y caminar por la vida para que su hijo sepa y conozca quien fue su padre, quien fue ese que cambio la vida a millares de personas, quien fue el que hizo que los españoles fuéramos mejores y mas cultos. Eras un nexo de unión. Eres un nexo de unión. Tus seguidores somos parte de ti pero ni sumándonos todos llegamos a una ínfima parte de ti. Eres el más grande.

Te has ido como los genios, te has ido como los grandes, te has ido como los honrados. Cuando uno toma una decisión en la vida actúa y ya está. Hasta para eso has sido único. No has necesitado despedirte porque no te vas. Porque queda tu voz, tus pasajes, tus tertulias, tus comentarios. Se ha ido tu cuerpo pero tu alma seguirá perdurando siglos y más siglos. Tu has hecho que seres que habitaron este mundo hace miles de años sigan entre nosotros y puedes estar tranquilo que nosotros haremos que tu perdures lo mismo o mas que ellos. Echaremos de menos oírte de nuevo, leerte de nuevo, pero al igual que tu imaginabas para ver, nosotros imaginaremos para seguir a tu lado cada noche escuchando tu programa.

Darte las gracias es poco porque el legado que has dejado no tiene precio. Desde ahora cualquier premio que te den ya será tarde pero merecido. Desde ahora cada oyente nuevo te querrá como te queremos los que ya estábamos.

Gracias Juan Antonio por haber existido y gracias a Dios por haberte dejado con nosotros 41 años llenos de vida y sapiencia. Si yo hubiera sido Dios te hubiera querido a mi lado mucho antes.

Ahora sabemos que cuando vayamos al otro lado podremos oírte de nuevo y seremos felices como una lombriz.
Amigo Juan Antonio, ¡¡FUERZA Y HONOR!!.

Hola donde quiera que estés, quisiera dedicarte unas palabras porque me dejaste un recuerdo imborrable en mi mente y el mundo que vivo cada día se halla vacío sin tu existencia que recuerdo y echo de menos muy a menudo sobre todo cuando se acerca el fin de semana y por la noche no estas al otro lado de la radio para seguir escuchándote en directo en el programa radiofónico de madrugada.
Te conocí escuchando los fines de semana por la noche la Rosa de los Vientos recostado en la cama con el auricular conectado a la radio y escuchando tu valiosísima voz y no menos enriquecedora manera de hablar, divulgar, moderar e informar sobre los contenidos y temas tan interesantes que ofrecía tu programa de radio.

Tus narraciones eran sensacionales, conseguiste que me sumergiera en esos mundos históricos que detallabas como si los hubieras vivido en persona apoyado en un gran rigor documental pero con detalles y destellos narrativos que son un “plus” que te hace insuperable y con un “don” especial que hace que el oyente aumente el interés por tus narraciones cada vez más y más hasta sentir auténtica pasión por imaginar la narración de una manera veraz, única y especial que nunca antes había conseguido. Ni en el colegio, ni leyendo libros ni escuchando a otras personas las narraciones que puestas en tu boca sonaban totalmente diferentes y cautivadoras.

Gracias por todo tu legado y como tantos otros genios , ser único e irrepetible que ha dado la humanidad deseo que seas recordado siempre.

Nuestro querido Cebrian era ese señor que por las noches entraba en mi habitación y me contaba cuentos hasta que me dormía. Aunque me durmiera el seguía contándome el cuento por si acaso. Resulta que esos cuentos no eran tales, sino pasajes de la historia, y resulta que hoy por hoy lo sigue haciendo, él o su inmensa familia. Gracias por todo lo que me has enseñado. Donde quiera que estés, seguro que estas bien, con Alejandro, julio cesar, vlad tepes etc……

No voy a contar lo que significó para mí encontrar casi por casualidad hace unos 10-12 años un especial de Semana Santa que se estaba emitiendo en una radio que nunca había sintonizado, pero me enganchó tanto el programa como Juan Antonio y sus colaboradores. Con el paso de los años dejé de hacerlo asiduamente y me he vuelto a enganchar hace unos 4. Todos los días desde entonces, escucho los podcast de cada fin de semana alternando con pasajes de la historia y otros audios. Hace unas semanas edité este podcast que espero os guste. http://www.ivoox.com/mi-pequeno-homenaje-a-cebrian-audios-mp3_rf_1797494_1.html
Fuerza y Honor!.

Un abrazo muy grande a todos los rosaventeros, en especial a Silvia y Alejandro. Aunque hayan pasado cinco años, la voz de Cebrián sigue viva, así como su legado. Su gran labor me ha servido para transmitir su pasión por la Historia a mis alumnos, muchos de los cuales son ahora rosaventeros. Fuerza y Honor desde Granada.

Laura y Juanlu.

Hoy me siento emocionada y feliz, cuando recomiendo, a una recién estrenada y deseo que duradera amiga,tus libros y los archivos sonoros de los pasajes de la historia,por que estoy segura que los va a disfrutar de veras y seguro que la enseñaras tanto como a mi.Gracias Cebri,sigo aprendiendo en tu compañía.

Mi estimado Juan Antonio, qué orgulloso debes sentirte allí donde estés. Recuerdo uno de tus prólogos. En él decías que la Historia solía resultar un tocho y poco interesante generalmente, que te esforzarías en cambiar ese concepto y querías demostrar que, inteligentemente bien contada, la Historia era apasionante. Pues bien, he dicho que estarás, no orgulloso, orgullosísimo por haber conseguido tu reto. Has conseguido cambiar la manera en que miles de personas ven la Historia.

Quiero explicarte mi experiencia. Hace unos 8 años, en mi etapa de estudiante universitario, buscando en el dial de la radio algo para dormirme di fortuitamente (bendita coincidencia) con un pasaje de la historia, era el de los Vikingos. En el pasaje utilizabais una música de fondo que te transportaba a la época y junto con tu narración podía recrear en mi cabeza lo que estabas contando. Ese fue el comienzo de mi singladura con la Historia. Desde entonces, empecé a escuchar más y más programas todas las noches que podía, buscaba información de los personajes que más me sorprendían, me empezaron a gustar los documentales históricos, empecé a leer libros, en definitiva, a culturizarme. Estaré eternamente agradecido a ti y a todo tu equipo. Recuerdo un viaje que tenía que hacer a Roma, pues bien, no pude marcharme sin escuchar antes todos los pasajes pertenecientes a esa época. Así me ha pasado cada vez que he visitado lugares importantes. Ahora, todas las noches me voy a dormir y pongo algún pasaje para relajarme, escucharte y conseguir acabar el día sabiendo algo más y estar feliz como una lombriz.

El día que tu inmenso corazón dijo adiós, sentí como una parte de mí se había ido. Maldeciré ese día toda mi vida. Era como si de un familiar se tratase. No he tenido el placer de conocerte en persona aunque espero que estas palabras que escribo sirvan como pequeño homenaje a una de las personas que he tenido como referencia. Hasta siempre Maestro.

Se despide un rosaventero, Jorge.

Juan Antonio, antes de decir nada más, gracias, muchísimas gracias. Por un montón de cosas, por todo lo que hicistes tú y el equipo de Turno de Noche y de La Rosa por mí. Porque durante una época de mi vida triste y dura, fuiste con tu humor, tu curiosidad, tu sentido de la maravilla, el fascinarse con las cosas interesantes de este mundo… alguien muy importante que me hacía la realidad más llevadera y ponías un punto de ilusión, un sentirse parte de algo grande e importante, una familia, la de Turno/La Rosa. Aquellos turnos de noche (valga la redundancia) en la cadena de montaje se soportaban mejor con tus historias, misterios, el Maestro Sombrita (recuerdo cómo esa frase ‘Ola de avistamientos por el norte y por el sur’ surgía inevitablemente cada vez que encontraba a algún fan del programa entre los compañeros o amigos)… Cuántas lecturas he podido descubrir gracias a un tema o un libro comentados en el programa. Cuánto he soñado con la Isla del Roble, el cementerio de los ataúdes deslizantes de las Barbados, las ciudades perdidas del Amazonas, los rincones ocultos del Escorial… Entre tanta mediocridad fue maravilloso encontrar un rincón de cultura, humor, rigurosidad y amenidad. Escuchando en el PC el Vespretine digo bien alto ¡Fuerza y Honor! ¡Gracias amigo Cebri!

Tu voz musical fue sumergida en las aguas profundas, y todas las nostalgias gravitan sobre las llanuras infinitas.

Silencio y paz.¿ Qué sabemos nosotros?

Te admiramos. Te recordamos.

te añoro, amigo, siempre es siempre….

Qué decir que no se haya dicho,
es fácil recordar tu legado pues es el legado heredado de los dioses. El compendio del saber transmitido a través del tiempo por una voz fácilmente reconocible, cuyo eco transita, inalterable, por los rincones de la memoria.

COMO ENFERMERO, DE TURNO DE NOCHE, PARADOJICAMENTE ASÍ CONOCI LA RADIO DURANTE MI TRABAJO….TE DESCUBRI CON TUS PASAJES DE LA HISTORIA….A PARTIR DE ENTONCES NO PUEDO DEJAR DE ESCURCHAR LA ROSA DE LOS VIENTOS Y DE AMAR LA HISTORIA, LA CIENCIA Y LAS BUENAS FORMAS…..GRACIAS COMPAÑERO DE NOCHES….

¡Esto tengo yo que contarlo! decía Juan Antonio con un gesto divertidamente perplejo cuando pudo constatar que los libros que firmaba, varios, por cierto, además de duplicados iban para una misma pareja.

¡Cuánto te echamos de menos, querido amigo!

creo que es un bonito homenaje el que los más pequeños de cada casa (en mi caso los sobrinos) se acostumbren a conocer nuestra Historia con los relatos de la Historia que recupero a través de la red. Y hacerlos llegar a gente que no vive en España me encanta también

Maestro,

Has cambiado mi vida. Así de simple. Y para siempre. puedo afirmar que prácticamente no paso un día sin tí. Ya formas parte de mí. Maestro. Eres el Jefe. Eres el mejor. Paradójicamente, te descubrí tarde, en 2005. Y gracias a internet. Y a tus pasajes de la historia. Entonces no comprendía. Cömo había vivido hasta ahora si tí. Sin tu magia, sin tu compañía, sin tu conocimiento. Desde ese momento me acompañas siempre, allí a donde yo vaya, tú vienes conmigo, maestro. Y también ahora sé, que cuando yo también me vaya, me iré contigo, a luchar, a volar, a imaginar. A viajar contigo. Maestro. Maestro.

Lo dijo el gran Neruda en su canción de amor nº20:
“La misma noche que hace blaquear los mismos árboles, nosostros, los de entonces, ya no somos los mismos.”
Así es, al menos en mi caso, ya nunca seré el mismo. Desde que descubrí a mi amigo Juan Antonio cambió mi forma de entender algunas cosas, encontré un mundo donde muchos tenian mis inquietudes e intereses, aprendí que la curiosidad y la imaginación son dos virtudes fundamentales.
Después, casi sin tiempo a disfrutar tan precioso hallazgo, llegó la hora más amarga y un incrédulo vacío me embargó violentamente. Trás la incredulidad vino la rabia, esa furia de sentirse abandonado, esa impotencia que ahoga y oprime. Juan ya no estaba, ya no está, aunque lo busque cada noche entre fútboles, políticos, cotilleos y qué sé yo más.
De aquel tiempo recuerdo a mi familia, mi mujer, mis hijas, que optaron por dejarme tranquilo con mi pena, ellas no podían entender la sombra que me trajo alguien a quien no conocía, alguien que nunca supo siquiera que yo existía. Les expliqué que Juan me hablaba a mí personalmente, como a cada uno de sus oyentes, que fué alguien especial, distinto.
Luego fui recogiendo pedazos de su voz, nunca podré agradecer bastante a tantos que compartieron sus grabaciones conmigo, lei sus libros y, poco a poco, fui siendo consciente de su legado.
En fin, gracias por conservar a Juan Antonio vivo en su obra, yo por mi parte siempre lo llevo en mi memoria.

Siempre, desde el querido Turno de noche te escuche. Siempre me arrepentire, siendo tu asiduo seguidor, haberme mantenido en silencio y no haber llamado nunca a tu programa, me arrepentire de no haberte conocido personalmente y no haber charlado contigo. No me arrepiento, ni me averguenzo de haberte llorado larga y amargamente el día de tu muerte, MAESTRO. No puedo explicarme a mi mismo como se puede llorar tanto por una persona a la que no conoces personalmente y que no te toca nada, o si me tocó… Seguramente a todos nos tocaste el alma, sin duda.

I Certamen de Micro relatos “Escritores en su tinta – Doscientas palabras y un escritor como personaje-

Todos los uno de enero me sumerjo en la Sierra de Grazalema.
Aquella vez, sentado entre dos gruesas ramas de la copa de un centenario quejigo acolchado de musgo.
Volvió la misma y recurrente pregunta….
¿Escribiré este año mi primera novela histórica?
El tamborileo de la tenue lluvia sobre el impermeable, me acunó al sueño que espectralmente fue seguido por pisadas que remontaban la calzada romana.
Su luminoso rostro me era conocido. Sí era él; Juan Antonio Cebrián que con cazadora negra, morral al hombro y sombrero subía la montaña. Nos miramos y sin previo saludo más que el abrazo de ambas sonrisas, le hablé con el orgullo del lugareño, de nuestros yacimientos de Iptuci, Ocurri y Carissa Aurelia; abismados de siglos y frondes.
Él me musitó con voz del tacto de la seda, escenas de la mítica Tartessos, de turdetanos, godos, musulmanes y sus enigmas allí ocultos, animándome a ser el nuevo Shliemann.
El eco de su verbo se deshizo despaciosamente con el canto de las aves que acudieron a despedir a la lluvia.
Baje del árbol y una mágica “Rosa de los Vientos” venida, orilló a mis pies.
Entre sus espinas una nota.
Sigue a tu sueño.
¡Persíguelo!
Cristóbal Garrido Jiménez
Jerez de la Frontera 5 diciembre 2010

Fueron tantos años escuchándotes, que ya formabas parte de mi vida. Aún te hecho de menos.

Si, siempre estarás con nosotros, aunque pasen muchos años, siempre…. Te admiro profundamente, por lo mucho que has calado en todos nosotros, porque has hecho que muchos descubramos lo mejor, mas inquieto, y porque no divertido de nosotros mismos. Como dije el año pasado, te añoro, de todo corazón, pero me siguen acompañando los rosaventeros. FUERZA Y HONOR, SIEMPRE….

No soy nada mitómana, pero me sorprende que a estas alturas aún lo heche de menos, considerando que solo soy una oyente de sus programas, es curioso que cuando pienso en escuchar la radio siempre me viene él a la cabeza, y sigo escuchando la Rosa de los vientos, como no…, pero es que Juan Antonio lo hacía especial.
Espero que aunque esté muy liado con su nuevo programa le sigan llegando nuestras muestras de afecto.
Un cálido abrazo para las personas que sienten el vacío dejado en el corazón con su marcha.

Con Juan Antonio Cebrián, a lo largo de incansables noches de madrugada, viví miles de aventuras: buscamos la Atlántida desde las pirámides de Egipto, acompañamos a los templarios combatiendo junto a las legiones romanas… con él he aprendido, he disfrutado, he soñado, he acabado la carrera y he formado parte de un círculo privilegiado aunque nada exclusivo, el de los rosaventeros, unidos en torno a una pasión: la Historia.

Gracias maestro de las Ondas por hacer inolvidables y divertidas mis largas noches de estudio… has sido el mejor compañero… Y sobre todo gracias a ti, Silvia, por seguir con su legado, es admirable y todos te lo agradecemos sinceramente. Un abrazo enorme.

Hace muchos años, una noche buscaba desesperada en las ondas de radio algo que me diera consuelo en unos momentos de mi vida muy difíciles… encontre la voz de Juan, y no solo eso, encontre calma, inspiración, humor inteligente y una energía vital y cercana que sabía transmitir y contagiar de una manera muy expecial. Nunca lo conocí en persona, pero puedo decir que entró a formar parte de mi vida. Hoy no solo yo también mi hija forma parte de la legión de Rosaventeros fieles que os siguen incondicionalmente gracias a ese legado maravilloso que nos dejó e hizo nuestro. Siempre estará con nosotr@s. ¡ Por siempre Fuerza y Honor!

Tres años despues sigues en la mente y en los corazones de todos, al principio dolía escuchar tu voz a traves de los podcast pero eso a cambiado, ahora escuchar tu voz con ese gran humor que te caracteriza, yo creo que incluso que podía servir como terapia para aquellos que necesitan ánimos, por ello y muchas otras cosas… ¡¡ GRACIAS !!

Me encontré por primera vez con Juan antonio en sus artículos en el “Magazine” de “El Mundo”, hacia el año 2004. Desde entonces me llamó la atención su cultura y su interés por los temas históricos. Más tarde me enteré de que llevaba un programa de radio en Onda Cero, y empecé a escucharlo hacia mayo de 2005, cuando “La Rosa de los Vientos” se emitía de madrugada entre semana. Por cuestiones de mi horario de trabajo, le escuchaba en pocos momentos, sólo unos minutos. Pero me empezó a gustar su forma de llevar el programa.

El cual disfruté mucho durante los fines de semana de los años posteriores. Y aún lo hago: al menos, tomo café al final de la tarde del sábado, para poder escchar todo lo que pueda de “La Rosa de los Vientos”.

a la vez, he leído varios libros suyos, y me ha llamado la atención su amplia cultura, su apertura a diversas perspectivas interpretativas y su forma de escribir, tan amena y cercana al lenguaje del hombre corriente.

Es por ello por lo que considero a Juan Antonio Cebrián un ejemplo de:

1) Humanista: en la línea de los grandes pensadores griegos y cristianos, un hombre del Renacimiento, interesado por todo lo que afecta al ser humano, y a la vez con una opción clara por su dignidad ética y su centralidad epistemológica y ontológica. Es una postura difícil de mantener en el ambiente de “pensamiento débil” en que nos movemos. Ojalá nosotros, los amigos de Juan Antonio, sepamos continuar este camino señalado por él.

2) Pensador global e integral: abierto a todas las ciencias y disciplinas, tanto de las llamadas “ciencias naturales” como de las denominadas “ciencias humanas”. Y siempre vi en él, especialmente en su enfoque de los programas, un deseo de globallizar, de integrar, de tener un deseo interdisciplinar de síntesis. Una actitud muy importante en este tiempo de fragmentación del conocimiento en que vivimos.

Podría seguir explicando estas ideas que he expuesto, pero no es el lugar. Deseo al actual equipo de “La Rosa de los Vientos” mucha fuerza, muchos deseos de seguir ofreciéndonos un programa de calidad cultural y de una amplia visión de los temas que toca. Y que nunca olvidemos ese humanismo y ese deseo de integración de los saberes que llamaba la atención en Juan Antonio.

… Porque te las llevaste contigo, aún así nos dejaste la Fuerza y la esperanza de luchar por lo que merece la pena y el honor de haberte … …conocido,disfrutado,compartido reído y llorado.
Gracias por las ojeras, por tu humildad y sabiduria, por mimarmos cada noche.por tu integridad contagiosa,por hacernos mas felices.
Gracias siempre inconquistable conquistador de las ondas y fiel jardinero de nuestra eterna rosa.
Tu voz jamas se apagara, No conocí a Alejandro Magno (ya se que tu si) pero no te envidio por ello, yo conocí a Juan Antonio Cebrián , y en mi corazón Rosaventero existe una Rosa de Alejandria creada por el.
Fuerza , honor y … echarte mucho, muchísimo de menos.

Querido Cebrian, 3 años sin tu presencia en las ondas y seguimos echándote de menos compañero, tantas noches, tantas horas a nuestro lado, aun hoy día al escucharte en mis cintas de “Turno De Noche”, tus libros, mi pin del murciélago, tu foto firmada o con tus pasajes, me emociono y me enorgullezco de haberte escuchado en directo, de haberte “conocido” un poco, de leerte, de que tu legado nunca será olvidado, tu presencia, tu sabiduría, tu amor, tus risas y que tu siempre estarás allí.

Sabemos que estés donde estés, seguro que estas contento y feliz como una lombriz.

Descansa en paz por siempre, FUERZA Y HONOR COMPAÑERO.

Besos desde Córdoba a Silvia y familia.

Todavía pienso en la primera vez que te escuché. Todavía pienso en ese poderío, ese sentimiento, esa emoción, que denotaban tus palabras. Todavía pienso en esa pasión con la que relatabas tus pasajes de la historia. Y, sobre todo, todavía pienso en esa dulzura y bondad que convertiste, indudablemente, en un sello personal.

¿Cuántos años tendría yo? ¿Cuatro? ¿Cinco? Sí, creo que cumplía cinco años ese mismo junio. Entonces eras parte de “Turno de noche” y tu voz resonaba en mi vieja radio comprada en el “todo a cien”. Mi padre estaba a mi lado y la oscuridad de la madrugada había inundado toda la casa. De repente, empezaste a hablar. Y como a muchos otros, me atrapaste.

Qué noches más inolvidables me hiciste pasar. Tú y tus colaboradores, siempre hablando de esos temas que nadie quiere tocar pero que todos se mueren por comentar. Y, cuando pensaba que no podías superarte, llegó “La rosa de los vientos”, el mejor programa radiofónico que ha podido existir.

Todo lo que pueda seguir diciendo se queda vacío y sin sentido. Solo puedo hacerte este pequeño homenaje. Te fuiste, y eso no puede arreglarse. Ahora, solo me queda decir, mi querido Cebri:

Fuerza y honor. Descansa en paz, Juan Antonio Cebrián. Tres añitos ya sin ti, que se han hecho demasiado largos. Eras un gran locutor, pero una grandísima persona.

Siempre te echaré de menos.

¡Saludos a todo el equipo y miembros de la Asociación Cultural Juan Antonio Cebrián!

Un tierno saludo también al gran Maestro, que nos vigila atento desde los lugares más insospechados de la cultura.

Os paso la entrada de mi blog en la que hago referencia tal día como hoy a Juan Antonio. No es un blog cualquiera. Quiero decir, por ejemplo, “tal día como hoy”, no es el único en el que hablo de nuestro querido compañero. Tampoco es que sea un blog homenaje.

Para mí es un blog un tanto especial: es mi particular “Rosa de los Vientos”. Es un compendio de influencias, que cada día me hacen abogar más por la cultura, y cada día me hacen luchar más y más fuerte por las causas justas y contra las injusticias, al más puto estilo “Juan Antonio Cebrián”. Sincerándome con vosotros (ya que sois los miembros de “La Rosa de los Vientos”, fue un blog (el término blog bien pudiera haber sido “bloc de notas o cuaderno) que me decidí a hacer con esa firme intención, y con dos claras influencias presentes: La Rosa de los Vientos, y Jorge Salán (músico y compositor).

Sin más dilaciones, allá va mi sincero homenaje, breve, pero claro y conciso, pues seguro que todos tenemos presentes las sensaciones que nos recorrían al sintonizar Onda Cero y escuchar aquella cálida voz:

http://trainofhopes.wordpress.com/2010/10/20/fuerza-y-honor/

¡Un saludo!

Rubén.

En primer lugar quiero enviar un beso muy fuerte para Silvia y el pequeño Alejandro. Soy uno, de esa legión de oyentes que tras las brumas de las ondas hemos seguido a Juan, en mi caso, desde los tiempos de Turno de Noche en aquellas noches mágicas con el profesor Argumosa y su verbo de otro tiempo que nos hipnotizaba. Después en La Red, Azul y Verde, La Rosa de los Vientos, libros, entrevistas, artículos, etc…
Tras lo ocurrido hace 3 años, me sorprendí a mi mismo,pues nunca pensé que se pudiera querer tanto a alguien al que no has conocido personalmente. Y es que Juan era un fuera de serie, o como se dice ahora un crack. Yo soy de la misma generación que él, por el trabajo, los niños pequeños etc., en los últimos años, me costaba seguir de forma habitual el programa. Sin embargo, en algún momento difícil para mí, esperaba despierto, ansioso, la llegada de la 1:00 de la madrugada para escuchar la voz de mi amigo Juan quien tras el sumario de contenidos decía aquello de “os saluda feliz como una lombriz vuestro amigo y compañero Juan Antonio Cebrián”. Yo volvía a hacer las paces conmigo mismo.
Ahora, gracias al podcast, sigo semanalmente La Rosa de los Vientos en el coche, cuando voy y vuelvo de mi trabajo . La hoguera que prendió Juan nos sigue dando calor. Os doy las gracias. FUERZA Y HONOR.

Hay que recordarlo mucho para que este más cerca…

Es difícil expresar con palabras lo que siento en estos momentos, lo que he intentado transmitir a toda la gente que me rodea y a los que como yo, somos cómplices de lo que transmitían y transmiten sus palabras. Fuíste y seguirás siendo la estrella que más brilla en el cielo de mis protegidos, de los seres que más me han aportado y me aportan en este mundo. Me enseñas cada día, te recuerdo desde el alba al ocaso y siempre, siempre siempre, en cada cosa que hago me acompañan tus palabras…..porque….me enseñaste a ser SABIO en este mundo de locos….

Fuerza y Honor…..

Hoy hace 3 años q te fuiste, pero simpre estas presente… como lo has hecho…. esperame, pues el resto de la etenidad deseo pasarlo con gente como tu….

Tres años, como pasa el tiempo. Tú estas ahí arriba en el cielo estrellado de Orión al lado de su espada, y yo sigo recordandote cada semana, escuchando tu voz que tantas noches me reconfortó y me entretuvo. Sólo te quiero volver a dar la gracias por tantas noches que me diste al calor de la hoguera de la radio. Puedes estar tranquilo , porque tu Rosa de Los Vientos sigue con rumbo seguro y triunfante. Siempre te recordaré, Fuerza y Honor.

As sido mi guia y mi compañia durante tantas noches que para my eres de my familia.Senti con todo el dolor de my alma que te fueras para hacer la programacion de la radio al cielo.Espero que donde estes recibas todo el cariño y todo el bien que tu nos transmitias a todos nosotros.UN ABRAZO DE ALGUIEN QUE NO TE OLVIDARA MIENTRAS VIVA.

Mi querido Cebrián: En tu rosa de los vientos redescubrí mi pasión por la escritura al oir tus historias. Te dejo este mi pequeño homenaje para que lo leas desde las estrellas.

El gato dijo guau, y el perro dijo miau. De no ser porque en otros universos las leyes de la física cambian, creería que estoy loco. Pero no, no estoy loco. Aquí hay leyes distintas. El átomo es más grande, el protón tiene carga negativa y el electrón no existe. Sin embargo hay gatos que dicen guau y perros que dicen miau. Una fantasía sin parangón que fue asimilada por mi mente hasta acostumbrarme a esas incoherencias. Pero cuando ya me había acostumbrado el perro dijo “buenos días” y el gato respondió “que pase un buen día”. Entonces me di cuenta que no acabaría de adaptarme a otras leyes de la física, por lo que decidí volver en mi nave cuántica a mi universo. Por la escotilla el gato me saludaba mientras el perro, que nunca fui de su agrado me hizo un corte de patas. Cuando regresé a mi universo me encontré con un perro, este me dijo guau. Yo le di una patada en el vientre y huyó corriendo. Poco después me crucé con un gato que dijo miau. Lo cogí por el cuello y lo zapateé contra el suelo. Ahora me sentía satisfecho y las leyes de la física cuadraban en mi mente. El átomo no es tan grande, el protón tiene carga positiva y el electrón va y viene de un lado a otro. Ya estaba en un universo elegante y concordante; podía dar patadas a perros y zapatear gatos porque la física tiene un campo de fuerza y yo, que soy tan insignificante en un caos discordante, podré ladrar y maullar sin parecerme a un animal.

Trabajo de noche. Lo hago desde 1995. Harto de escuchar penas en programas de testimonio que por aquel tiempo copaban las distintas frecuencias del dial me tope una madrugada de bruces con Juan Antonio y Turno de Noche. No podría decir exactamente qué fue lo que me enganchó de aquella voz, pero si puedo asegurar que desde entonces y hasta ahora esa voz nunca me ha abandonado. Recuerdo aún con amargura aquel sábado de octubre que como siempre esperaba el comienzo de La Rosa. La desazón que me produjo no escuchar su voz y a los pocos minutos el mazazo. El anuncio del fallecimiento de Juan Antonio. Sin poder remediarlo rompi a llorar. Jamas imagine que pudiera sentir tanto el fallecimiento de alguien con quien no habia estado jamas. Aún guardo el obituario publicado en “El Mundo”. Conservo todos los ejemplares de LRV (ese lazo que nos mantuvo unidos cuando, por respeto a nosotros, sus oyentes, prefirio aparcar el programa antes que trasladarlo a una franja horaria imposible), sus libros y por supuesto todos los audios de los pasajes, monograficos, versus, sus entrevistas en otros programas donde los entrevistadores (en muchos casos grandes comunicadores de mayor “fama” que el propio J.A.) siempre mostraban su admiración por Juan…. y como no esos maravillosos programas especiales de Semana Santa y Navidad. Su pasión por la historia y por personajes como Alejandro, Leonardo ó el propio Jesus de Nazaret era contagiosa y sabia transmitirla de una forma natural y cercana. Grande Juan Antonio y grande su legado. No hemos vuelto porque nunca nos fuimos. Y Somos Millones. Este es tu mejor legado.

Fuerza y honor juan antonio me ha acompañado en mis buenos y malos momentos, ha sido la salida, la luz que me a guiado cuando solo veia oscuridad. la calidez de su voz me daba abrigo y olvidadando los problemas me llenaba de sabiduria.ahora que ya soy madre su voz no se va ha apagar mi hija sentira el mismo abrigo de sus palabras para q cuando algo la preocupe y no pueda conciliar el sueño pueda estar tranquila escuchando la voz del cielo.

Siempre estara en nuestros corazones

Tantas noches en tantos años esperaba a que llegase la hora de tu programa, entonces mi soledad se atenuaba, incluso se me olvidaba. Cuanta imaginación derroché oyéndote, cuantos mundos viví contigo.

Tu ya no estás pero sigue tu legado.

Un abrazo allá donde estés.

De la mañana a la noche, me encontre de pronto con un mundo nuevo. Resulta que mis ideas sobre la calidad del ser humano se encontraban tan cerca como darle la vuelta al díal. Encontre tu voz, tus conocimientos, tu buena persona. Acompañado de otros seres humano que compartían anhelantes ideas de mejorar el mundo que vivimos.

Se que nos estas viendo, que nos sientes, que sigues con nosotros. La positividad y claras ideas, las sigues compartiendo. En Américaca latina, cuando se nombra a desaparecidos de éste mundo, se contesta: PRESENTE.

Te nombramos: Juan Antonio Cebrian

¡PRESENTE!.

Acabo de enviar este texto por correo a La Rosa de los Vientos… pero visitando la página de la Asociación he visto que habían abierto esta sección de homenaje…, así que también lo dejo aquí, en este foro.

– – –

Hola, saludos a todos los responsables de La Rosa de los Vientos:

Por fin me decido a escribiros… Hace tiempo que lo tenía pendiente y quería haceros partícipes de mis emociones respecto del programa.

Yo fui un rosaventero tardío, y es que comencé a escucharos durante la temporada 2006/2007, coincidiendo con mi destino como maestro en un pueblecito de la Sierra de Albarracín. Yo soy de Huesca y recorría los 300 km que separaban ambas localidades los domingos por la noche. Un día, camino de la Sierra, estaba cambiando el dial, cuando topé con nuestra querida Rosa, y desde entonces siempre viajabais conmigo aquellas madrugadas de los domingos. Recuerdo que conducía a 80 km/h en la autovía (a aquellas horas yo era casi el único automovilista) para oír durante más tiempo el programa, ya que al llegar a Albarracín y atravesar el túnel que conducía a la Sierra, se perdía la señal de radio.

Me fascinaban los conocimientos y la sabiduría de los colaboradores, pero Juan Antonio era, sin duda, el alma del programa. Cómo apreciaba su vastísimo saber, su extraordinario sentido del humor, su humildad.

El siguiente curso seguí destinado en el mismo pueblo, así que continuasteis acompañándome…, pero un triste, triste día, casi llegando a la escuela me pareció escuchar que Juan Antonio había muerto… ¡no me lo podía creer! Cuando llegué al colegio busqué la noticia en Internet y era cierto. ¡Qué dolor!… esa persona tan admirada por mí, ya no me hablaría más las noches de los domingos, camino de las montañas. ¡Qué pérdida para el mundo de la cultura!, pero, ante todo, qué pérdida para sus seres queridos, para su círculo de amistades.

…

Empecé a buscar información sobre él, sobre el programa… Descubrí los podcast… y cambié el radio-CD del coche por otro con USB para poder escuchar los programas de otras temporadas anteriores… Desde entoces Juan Antonio suele viajar a mi lado, en el coche, camino de la escuela, o de mi casa. No termino de hacerme a la idea de que alguien tan extraordinario como él ya no esté en directo en las ondas…, y cuando escucho llas nuevas ediciones de La Rosa, no puedo evitar echarlo de menos.

Leyendo Fuerza y honor, me enteré de que había vivido en Binéfar. Me sorprendió y me dio un vuelco el corazón porque yo viví mi infancia allí. Ahora tengo cuarenta años, y mi hermano mayor era de su quinta…, tal vez nos cruzáramos por las calles de Binéfar cuando éramos niños, tal vez.

¡Qué gran genio!… y qué humilde, como debiera ser todo sabio.

Un abrazo para todos vosotros y, especialmente, para Silvia, esa compañera que anduvo junto a él media vida.

Afectuosamente.

Alberto

Las noches en un barco,en la inmensidad del Oceano,las solia pasar en localizar una emisora,con el turno de noche solia cumplir mi Guardia en el puente,con los años maduramos juntos, y me pusiste una rosa de los vientos mas en mi cabeza, aparte de los compases y Gps….. pero pusiste un Norte en mi,el ser algiuien que las noticias las leo y oigo por diversos medios,esa reflexion que siempre nos pedias a nosotros.

te deseo un feliz viaje a donde sea eso….
Eskerrik asko,juan antonio biotz biotsez…
Gracias Juan Antonio,gracias de corazon….

Por problemas familiares siempre he estado solo y cuando tuve edad me fui a trabajar, siempre oia a Cebrian, era como un oasis en el desierto, cada vez que habia programa estaba oyendole, si me lo perdia me lo descargada, pero siempre intentaba oirle.
Me crie con el, y cuando tuve mi vida centrada con mi casa, mi trabajo fijo y mi pareja, a las dos semanas de vivir como una persona “normal” tras mi vida pasada, tras esas dos semanas el murio, no llore tanto en mi vida como cuando me entere el domingo por la mañana, ya me extraño que pusieran musica y no el programa, y al dia siguiente fue como si una parte de mi muriera.
¿Estaba esperando a dejarme centrado para morirse?
He oido todo lo que hay de el y he leido practicamente todo, no lo olvidare nunca.
No creo en dioses, solo en la energia, y la suya debe estar protegiendo a los suyos para siempre.

Te conocí a traves del podcast hace un año, me atraparon tus pasajes de la historia con esa voz firme, segura dulce y amable ; con el tempo de la narracion perfecto y los efectos sonoros, que parecen situarte en el centro de la accion; cada vez necesitaba esccuchar mas y mas, ya no podia conciliar el sueño, sin antes escuchar algun retazo de la historia.

Parece mentira pero en este poco tiempo te habias convertido en un buen amigo.

El mazazo fue cuando quise saber mas de tu programa y vi la noticia en internet, desde entonces no he parado de echarte de menos ni un solo dia. Parece mentira que una persona que ni siquieras conoces te pueda transmitir tanto, solo a traves de su voz, eres un faro que me ha guiado a ser mejor persona

y ese es tu mejor legado

Fuerza y Honor

Mi querido Juan Antonio:

Te escribo esta carta porque sé que te llegará allá donde estés, un lugar maravilloso, no me cabe la menor duda porque tú estarás allí. Seguramente te encuentres rodeado de buenos amigos escuchando expectantes aquellas hazañas de héroes que sólo tú, de esa forma magistral, sabías contar.Son tantas cosas las que me hubiera gustado decirte que no sabría por donde empezar, cuánto me hubiera gustado intercambiar unas palabras, una sonrisa o tan sólo una mirada. Para mi desgracia esa esperanza se fue un fatídico 20 de octubre de hace escasos dos años.
He de reconocer que no tengo la suerte de presumir de ser oyente tuyo desde Turno de Noche o principios de La Rosa de los Vientos, pero sí de decir que has marcado mi vida de una manera impresionante, sé a buen seguro que no soy el único, cosa de la que me alegro enormemente, y también puedo decir sin miedo a equivocarme que tu recuerdo amigo Cebri, y permíteme el lujo de autodenominarme amigo tuyo, siempre seguirá vivo en cada uno de nuestros corazones y, por ello, perdurará hasta la eternidad.También me viene a la memoria la voz entrecortada de tu gran amigo Fray Juan Ignacio de la Cuesta cantando la canción que esa misma noche debería haber sonado en los micrófonos de Onda Cero, en esta ocasión lo hizo a través de los de la SER, con un único objetivo, darte su último adiós.Son muchas personas a las que has dejado huérfanas, querido amigo, sé que lo sabes y que allí donde estés seguirás disfrutando con un micrófono en la mano divulgando esos fabulosos pasajes de la historia y, por qué no, charlando y dando clases magistrales con tu querido maestro Germán de Argumosa y tu añorado Fernando Jiménez del Oso esperándonos a nosotros, tus amigos, para unirnos a esa gran familia en una nueva emisora, la llamada Onda Cielo. Hazlo, querido amigo, y no pierdas nunca esa maravillosa sonrisa, sé que tarde o temprano nos encontraremos y disfrutaré como nunca de tus historias y de lo más importante de tu amistad.
Gracias por todo mi añorado maestro.
¡¡¡Fuerza y Honor!!!

P.D. Sirva esto para que Silvia y sobre todo el pequeño Alejandro sepa quién era su padre, una maravillosa persona que marcó de forma inimaginable a miles y miles de personas. Nos dejó el maestro, amigos, pero sé que su legado está en buenas manos. Alejandro, sé que no defraudarás a tu padre y recuerda: nadie mejor que él cuidara de ti. Un fuerte abrazo, pequeño amigo.

Sí, amigos rosaventeros. Juan Antonio está permanentemente en mi memoria, cómo lo echo de menos, cómo lo echamos de menos. Yo no se exactamente cuáles han sido las consecuencias de su ausencia, en audiencia, etc. Sólo se una cosa, siempre habrá un antes y un después de aquel fatídico 2O de octubre de 2007, grabado a fuego. En mi caso particular y, probablemente, en el de otros oyentes, tengo que reconocer que no es lo mismo ahora que antes de. Sigo escuchando el prorgrama, pero no con la frecuencia con que lo hacía cuando estaba en vida Cebrián. En la vida hay personas sustituibles y otras insustituibles, y Juan Antonio era una de estas últimas. Un hombre renacentista, un Homo Universalis como su admirado Leonardo. Un hombre con un carisma especial, de esos que salen una vez en la vida. Amigos rosaventeros, disfrutemos del legado de su obra, y trasmitamósla de generación en generación ya que -como diría él- es el anhelo de nuestro porvenir. ¡FUERZA Y HONOR!

Mucho tiempo he esperado para escribir estas pobres líneas, pero no por ello he dejado de tenerte presente cada día, Juan Antonio, amigo y mentor.
Que extraño encanto tuviste Juan, que sin vernos ni oírnos nunca, te siento como uno más de mis cercanos.
Te juro amor eterno.
Gracias.

Que decir queriodo amigo, que cada día de mi vida recuerdo ese momento en que te oí por primera vez. En uno de esos poscatds que tu nombrabas con orgullo, sabiendo que la rosa es el programa mas descargado de internet.
Desde aquel día puedo decir con nostalgia que me convertí en parte de esta gran familia de rosaventeros. Aquello me marcó profundamente. Hoy día acabo de empezar a estudiar Historia en la universidad. Adivina por que te agradezco tanto haberte conocido. Un saludo maestro cebri.

Despues de dos años su falta todavia me afecta. yo me acostumbré a dormir escuchanda su voz fuerte y dulce a la vez, ahora si no puedo dormir la rosa de los vientos me lleva a ese lugar de los sueños donde cebri sigue haciéndonos sonreír.

Muchas personas no entienden que sin conocer en persona a alguien se la pueda hechar tanto de menos. Trabajaba de noche cuando comenzaste “turno de noche” buscaba algo diferente no me gustaban los programas que habia en la radio y te encontre en el primer programa, desde entonces me acompañaste, nunca me defraudaste siempre aprendia algo nuevo, cuando desapareciste de la parrilla tenia un sexto sentido contigo sin saber nada ponia la radio y aparecias con un nuevo libro o con un programa especial… daba siempre en el clavo. Siempre me ha gustado la historia pero contigo me gusto mucho mas. Gracias por haber estado ahi, siempre tendras un rinconcito en mi corazon. bss

Te lloré todo un día. ¡Cómo empecé a echarte de menos ese día! Todos los Miércoles trabaja en una pequeña oficina, de nueve de la mañana a nueve de la noche, sólo descansaba para comer de una a dos de la tarde. Tenía ese día para escuchar por internet los dos programas del fin de semana anterior. Los Miércoles eran especiales, a pesar de las horas que trabajaba, te podía oir tranquilamente, era maravilloso. Ese día procedí como todos los Miércoles, a conectar el programa por internet cuando empiezo a leer el trágico suceso, a ver lazos negros de luto, no entendía nada. Habían pasado cinco días de tu muerte y yo no me había enterado. Lloré todo el día mientras trabaja, no me lo podía creer. Llamé a Hugo, mi novio, para darle la noticia. Se entristeció enormemente. Hugo se había convertido en un fan tuyo a través de mí, le encantaban tus Pasajes de la Historia. Me había hecho bajar todos por podcast y los tenía en su MP4 para escucharte mientras corría. Corriendo Hugo se fue. El 23 de Julio de este año Hugo salió a correr mientras te escuchaba y no volvió. Uno de los pocos consuelos que tengo es que te habrá encontrado ahí arriba y estará presenciando tus tertulias. ¡Te habrá conocido personalmente! Cuando me toque a mí unirme con él, te escucharemos los dos.

Hoy, con tanta alegría que tristeza, pretendo que estas letras sirvan de modesto pero sentido homenaje, al hombre que durante años marcó por completo a la mayor familia española. Una familia de miles y miles de personas que durante largas horas de sueño despierto, sintieron sobrecogidos, ensimismados y sorprendidos, lo increíblemente atractiva que puede ser la ciencia, la historia y lo sobrenatural, cuando son contadas por la voz más cálida y renacentista de la radio española. Me refiero, si aun no se ha dado cuenta, al genial, al carismático, al viajero del tiempo Cebrian, Juan Antonio Cebrian, la voz y padre de La Rosa de los Vientos. Ese espacio que durante los sábados y domingos en Onda Cero, nos enseñó a muchos a conocer nuestro pasado, de una forma distinta a lo habitual, en definitiva mágica.
Fue apenas dos años atrás, un domingo 20 de octubre, cuando al conectar la radio de mi coche, a la 01:00 de la madrugada, la voz de un triste comunicado helaba la sangre de mis venas. – Juan Antonio Cebrian, ha muerto – decía. Perplejo, sólo pude parar mi marcha en la gasolinera más próxima para llorar desconsolado por la noticia. Sí, extraño, pero cierto. Llorar y sentir como propia la pérdida de una voz, de un personaje al que ni siquiera llegué a conocer de frente, al que jamás estreché la mano, con el que nunca crucé una conversación.
Así era esa voz, su fuerza y honor, hizo que miles de amigos de la Rosa de los Vientos, sintiéramos la perdida con un dolor extraordinariamente íntimo y singular, a pesar de ser “sólo” oyentes. Algo que quizá, a bote pronto, no se conciba con lógica y parezca incluso excesivo, pero perfectamente comprensible para aquellos que, como yo, tirábamos de podcast para dormir todas y cada una de nuestras noches, con la voz del “Cebri” trasladándonos ora a las Termópilas, ora Alejandría, las aventuras de héroes de leyenda que sólo él conocía de primera mano.
Sus Pasajes de la Historia no eran simples cuentos de batallas o conquista. No Cebri, tus relatos narraban lo que sólo tú habías visto y vivido, nos describías al detalle tus paseos por las calles de la Córdoba de Abderamán o la judería de Toledo, cómo lloraba Alejandro Magno o soñaba Sebastián de Portugal. Nos lo contabas, como tú lo contabas, tan sencillo y real porque habías estado allí. Lo sé, te imagino, te visualizo paseando por la Roma Numantina, sentado a orillas del mediterráneo en Cartagonova, divisando a los lejos ordas fenicias preparadas para la conquista. Escondido como estabas en los montes lusitanos recogiendo apuntes de Viriato. Sir Amenophis IV, conocía de primera mano lo divino y lo humano, por que él, simplemente había estado allí. Tengo claro y no me equivoco, que a cada época le corresponde un genio, y como genio Juan Antonio, vivió todas y cada una de esas épocas. Unas de escribano, otras de inventor… ¿serías acaso Miguel Ángel el renacentista?, ¿serías Khan, Leonidas, Lucanor?…Venias de uno a otro siglo, y cuando ya sabían de ti, desaparecías… sin más, dejando un alo de leyenda para ser contada también por ti 2 siglos después.
¡ Es una locura! pensarán mis lectores, pero de verás digo, como otra prueba más, que los genios viven rodeados de genios, y éste no era menos. Si no conocían al Conde de San Germain, era también su colaborador, en este siglo encarnado en una voz nerviosa y genial, Carlos Canales, ora fabricando cerveza, ora haciéndonos comprender los detalles de las guerras Carlistas. “Al otro lado” avenido desde el mismísimo Akhasa, el protector del mundo invisible Jesús Callejo, con el que Cebrian se fundía en Abrazos. Y, de frente y perfil, Bruno Cardeñosa, el mismismo porteador de la cámara de Benítez en Caballo de Troya. Como héroe de leyenda, al lado y a la misma altura, estuvo acompañado de su alma gemela, su complemento, su otra naranja, nuestra Silvia Casasola.
Así fue, así es y así será cuando lo disfruten generaciones venideras disfrazado de algún otro personaje que será capaz de cambiar el mundo. Cebrian, que se fue por la puerta grande, que calló y dejo sin escribir lo que para otros sería un Bestsellers, sigue presente, Cebri, sigues aquí y, por años que vayan, seguiremos durmiendo contigo al oído. Seguiremos recordando contento y feliz como una lombriz, a nuestro amigo y compañero Juan Antonio Cebrian.

Setas alucinógenas y demás engüentos era el tema de las 4C estando una noche en mi laboratorio haciendo una electrólisis para recubrir de plata un metal con nitrato de plata. Era estudiante de químicas y a partír de aquella noche LA TRANSFORMACIÓN, empezé a notar que no había noche que pudiera acostarme antes de escuchar la rosa de los vientos y esperaba con paciencia los pasajes de la historia, las tertulias, un mundo nuevo se abrió ante mí, incluso llegué a plantearme en cambiar de carrera y hacer historia, eso amigos es el poder de El Siempre Eterno Juan Antonio Cebrián.

Querido Compañero, he llorado por muchas cosas en mi vida,cuando murió mi pececito de color naranja con 4 o 5 años, cuando murió mi padre con 13 años, he llorado por amor, he llorado de alegria y tambien por desamor, pero nunca imaginé que iba a llorar y a añorar tanto a una persona que nunca conocí ni toqué,que no sabía de mi existencia auque por ella vivía, nunca lo imaginé…
Te quiero donde quieras que estés, y espero algún día abrazarme a tí junto a mis personas queridas, aunque esta vez sabiendo de mi vida.

Fuiste pionero al hablar de la repercusión de internet a mediados de los noventa, y nos hiciste partícipe de cada novedad, con La Red, programa que me encantaba.

El honor de haber estado madrugada tras madrugada escuchándote se convirtió en un credo para mí, en una religión, en una ineludible quedada,pues a través de las ondas hacías viajar mis sueños.

Los vientos de la Rosa con propuestas siempre interesantes cada noche iluminaban y creaban esperanzas de que otro mundo mejor era posible. Tu partida significó una marcha irreparable, insustituible, dejando un inmenso vacío, pues lo llenabas todo con asombrosas historias, nos deleitabas con fascinantes relatos, de misterios y naturaleza.
Tu paso no fue fugaz, pues imprimiste en todos tus oyentes un espíritu crítico y tu personal voz dinámica, positiva, nos emocionó cada segundo que nos diste. Por eso en unas fechas tan significativas donde recuerdo como sacudió mi alma aquella aciaga madrugada quiero darte las gracias siempre, honrar tu memoria , tu generosidad cómplice con la audiencia que siempre estuvo contigo.

Los audios ahí siguen, tu voz se quedó con nosotros, y de vez en cuando recurro a ellos. Fue épico todo lo que conseguiste, el legado es maravilloso.
Un blog dedicado a tí nació como agradecimiento por todo lo que me aportaste:

http://rosaventeraleonesa.blogspot.com

¡Gracias mítico Cebrián!

¡FUERZA Y HONOR!

SEGURO QUE HABRAS HECHO MEJOR A LOS NUEVOS Y MUCHOS AMIGOS QUE POR ESAS CIUDADES TE VAS ENCONTRANDO.

Quisiera dejar aquí mi homenaje a esta gran hombre. Sólo decir que me enganché al programa cuando al volver de salir los sábados, escuchaba para dormir los pasajes de la historia.
Nunca me ha gustado más eschuchar historia que cuando oía el programa y los pasajes de la historia, la sensación que me entraba de tranquilidad era increible, debe ser parecido a cuando a un niño le cantan una nana.
Ha todo el mundo le recomiendo que eschuche el programa hoy y siempre, no debe quedar nadie al que no le haya recomendado eschuchar el programa, antes de que Juan nos dejara y después.
Para terminar decir que espero que el entusiasmo que ponía Juan en lo que hacía nos acompañe y nos guíe.
Y como dice una canción, “olvidame tú que yo no puedo”.

Todos los días me acuerdo de Juan. Ya porque piense en él, porque lea alguno de sus libros, o escuche su voz en los monográficos, pasejes de la historia que guardo como oro en paño en cds y mp3. También busco consuelo en él en momentos de incertidumbre intentando que mi barco mantenga firme su rumbo con su lema por bandera “fuerza y honor”, y con sus enseñanzas por timón. Asi mismo todas las noches, cuando me despido de mi gato, encomiendo su custodia y cuidado a Cebri, porque sé que no me fallará. Para mí no se ha ído sigue presente en mi corazón, como mí guía, mi maestro, mi guardían y sobre todo mi amigo. GRACIAS POR TANTOS AÑOS. GRACIAS POR SEGUIR AHÍ. COMO TU ME ESCRIBÍAS SIEMPRE EN TUS LIBROS UN BESO CON MI AMISTAD, CAPITAN DE LA ROSA.

Juan, siempre admirado, tambien llorado.
Aun saboreo tu humor y conocimiento con devoción. Como un gran reserva, duerme en mi sala regia algún capítulo en el que volverás a destapar tus nobles esencias de humor, respeto, dulzura y entrega.
Con fuerza nos sobrepondremos y con honor difundiremos tu legado; vivo, eterno y edificante.

Gracias por todos estos años de difusión de la cultura en general, de la protección y conservación del medioambiente y de la historia y literatura. Murió el hombre, nació el mito, porque aunque no serías capaz de reconocerlo por tu infinita modestia, eres un mito, para mucha gente lo eres Juan Antonio. Como oyente de La Rosa de Los Vientos desde hace cerca de 10 años (una noche me cruce por casualidad con el programa y me impactó y gustó tanto que jamás dejaré de seguirlo, ya sea en directo por radio o por internet) te echo de menos cada vez que oigo sonar la sintonía del programa, todavía no me hago a la idea de no oir tu “…alegre y feliz como una lombriz vuestro amigo y compañero…” pero quiero que sepas que abuso de tu compañía cada vez que oigo tus “pasajes de la historia” o tus “versus”, o descargo de la red las tertulias de las 4c. Dejaste en buenas manos el programa, en muy buenas manos y tus seguidores y los del programa somos legión y siempre lo seremos. sin duda el mundo sería mejor si hubiera más gente como tú, si los que mandan os escucharan, si más gente escuchara vuestra voz y forma de pensar en lugar de buscar problemas. Tu legado no es sólo material o sonoro, es ideológico, una actitud ante la vida y estoy seguro que ante la muerte tambien. Por eso, sólo me queda decirte que tú mismo eres un gran pasaje de la historia, pasaje que jamás será olvidado. Fuerza y honor compañero allá donde estés. Muchas gracias.

Esta es mi humilde aportación, hecha a base de retazos de canciones de Mägo, con pequeñas variaciones al hilo de la ocasión:

Cuando veas una estrella fugaz, guárdala en tu corazón,

es el alma de Cebri que consiguió dar a los suyos su amor.

Cuando oigas a su pequeño Alejandro preguntar xq el sol viene y se va,

dile que es xq en esta vida no hay luz sin oscuridad.

Xq gracias a ti, aprendimos a ver con el corazón y la imaginación, además de los ojos,

comprendiendo q no todo es blanco o negro, sino gris, dependiendo del matiz,

mientras sentíamos que el Viento de la Rosa, había sido hecho para nosotros.

Xq cuando llegaba la hora de la Rosa, la luna era capaz de calentar,

y tu voz, nuestras noches acunar.

Así pues, seguiremos oyendo tu voz, y si aún nos queda amor,

impediremos que la Rosa muera.

Y aunque vimos a un manantial llorar, al ver tu alma irse en paz,

y al mar escupir un lamento, un dolor de tan adentro,

nuestra Rosa no murió.

Ahora y por siempre, como tú mismo dijiste en una ocasión:

Nuestro lider será el sol, y nuestro ejército mariposas,

por bandera otro anochecer, y por conquista…

por conquista comprender que hay que cambiar las espadas por una rosa,

la Rosa de los Vientos.

En medio de la noche hay una luz
que a cientos de miles de corazones
los busca y llega hasta los rincones
más perdidos, con la espada y la cruz,

los libros, los viajes, los sentimientos…
De todo es el mejor testimonio
la voz del Tusitala Juan Antonio,
nuestro rumbo en la Rosa de los Vientos.

Querido Juan;

Para mi eres como ese faro que desafía a la climatología con el fin de orientar a los que handan perdidos. Te estaré eternamente agradecido por ello.

En marzo de este año los dioses tubieron a bien hacerme el regalo más precioso que el ser humano puede recibir, mi primer hijo…no me costó mucho decidir el nombre que le iba a poner…mi pequeño Juan!.

Muchos te habrán escrito emotivos discursos evocando tus virtudes, y no es para menos.

Yo no quiero liarme, pues lamentablemente soy incapaz de reflejar mis sentimientos de forma certera mediante el texto, pero estes donde estes, seguro que percibes lo que siento.

Si he de nombrar alguna de las muchas cosas que me has transmitido elijo la pasión por el ser humano…es increible pero hasta el peor de los “malutos” queda en buen lugar en tus pasajes…

Ponce de León no encontró la fuente de la eterna juventud, pero tu si has encontrado un lugar en el que perdurar por siempre, y es en los corazones y los reproductores de mp3 de todos los que como yo, te admiran, te tienen como referente y te echan de menos.

Un abrazo.

Nunca me había interesado la historia, siempre he sido como se decía antes “de ciencias”, hasta que un fin de semana, regresando en un taxi, escuché un pasaje sobre Alejandro Magno. No sabía quién era el locutor, no sabía el nombre del programa de radio ni la emisora que lo emitía. Cuando llegué a mi domicilio moví el dial de mi radio hasta encontrar de nuevo el relato que me había interesado tanto.

Desde ese día, soy una fiel seguidora del programa de radio La Rosa de los Vientos, y descubrí el trabajo de Juan Antonio Cebrián.

Una persona GRANDE en la divulgación de la historia, y en otros muchos temas. Admiro su trabajo, su obra que ha quedado en el tiempo como el cuadro de un gran pintor, o el edificio de un gran arquitecto.

Es muy difícil pasar por la vida y dejar HUELLA. Juan Antonio Cebrián, profesionalmente creo que lo ha conseguido sobradamente.
Un orgullo.

Un saludo,

Capitán de la Rosa de los Vientos,
Amenofis feliz como lombriz,
más grande que Cleopatra y su nariz,
más bravo que en Esparta los Trescientos.
Explorador de un mundo de portentos,
Merlín contento de ser aprendiz,
Arturo de su Camelot feliz,
un reino de noctámbulos sedientos;
sedientos de tus héroes y tus sabios;
tus psychos y tus Versus de enemigos,
tus Pasajes de ameno historiador;
todo lo que saliera de tus labios,
charlando con tus Ces: cientos de amigos
en la onda de la Fuerza y el Honor.

Este texto lo escribí para el periódico universitario AulaSur, de la Universidad Rey Juan Carlos. Con esta contraportada quise rendir homenaje a Juan Antonio, a quien recuerdo muchísimas veces, como si realmente hubiésemos sido amigos durante años (y supongo que así ha sido). El número salió apenas una semana después de la fatídica noticia, por lo que os podéis imaginar el sentimiento que recogen las líneas que siguen:

“Ya encontraste tu rumbo en nuestra Rosa de los Vientos, querido amigo. Tu barco partió hacia la tierra de los sueños. Lejos, donde acaban todos los mares. Más allá de donde el conocimiento o la imaginación pudieran transportarnos. Atrás quedamos nosotros, Juan, los que hemos crecido contigo, a quienes has alimentado con tu fuerza, tu honor y tu entrega. A quienes has mostrado tu manera de sentir la vida de esa forma en que sólo pueden sentirla los más grandes, que es lo que has sido.
Contigo hemos viajado a lugares y épocas remotos, de tu mano,a través del mismo Universo maravilloso al que cantaron los Beatles.Atrás en el tiempo viste crecer a Alejandro Magno, llorar a Julio César, luchar a William Wallace, sufrir a Vincent Van Gogh… viste tanto que no pudiste más que nacer de nuevo y contarnos todo. ¿Recuerdas cuando empezó?
Hace ya diecisiete años un joven soñador abrió las puertas de aquella emisora, cargado de discos, y desde entonces enseñó música, con Discos Cero, y ecología, con Azul y Verde. Ese eras tú, Juan Antonio. También fuiste el primero en la radio en hablar de eso tan raro que llamaban Internet, en la Red, y así llegaste a aquel programa en el que, junto a Silvia, tu mujer y compañera, quisiste inventar la radio: Turno de Noche había nacido, con una legión de murciélagos que seguía a aquel Bruce Wayne de las ondas, y tú les arropaste a lo largo de más de mil noches. Desde entonces se unieron José Manuel Escribano, Germán de Argumosa, Fernando Rueda, Jesús Callejo, Carlos Canales y tantos otros locos que tenían ganas de contar lo que nadie contaba, haciendo que disfrutases de tu trabajo y pasión, convirtiéndola en la nuestra.
Años después empezaste otro proyecto, La Rosa de los Vientos y, aunque sin tu maestro, como llamabas a Germán, sí te acompañaron los demás, y el equipo creció con Bruno Cardeñosa, Juan Ignacio Cuesta, Tico Medina, Fernando Jiménez del Oso (con el que ya habrás compartido impresiones), Antonio Alcalá, Raúl Shogun y Martín Expósito, “el ser más corrupto de la radio”. Apenas superadas las mil quinientas emisiones, eres tú quien se marcha.
Apostaste por un ideal, por unir a las personas con la radio, y te mostraste siempre “encantado y feliz como una lombriz”. En los buenos momentos estuviste con nosotros, y en los malos no pudiste dejarnos, y nos regalaste LRV. De nuevo nos conquistaste. A tu lado acabé el colegio, el instituto, una carrera, y accedí a otra para hacer lo que me enseñaste a amar: periodismo.
Tanto nos diste, Juan Antonio, que te debemos todo, y sólo nos quedan lágrimas que entregarte. Ojalá pudieses seguir navegando con nosotros, querido amigo. Desde la cubierta miraremos al cielo, y recordaremos, por siempre, que tú guiaste el barco.
Tu Rosa de los Vientos seré…”

Estoy orgulloso de vosotros, por mantener su espíritu y su filosofía vivos. Muchas gracias por todo. Un abrazo, amigos.

Esteban Sánchez Rosado

Os descubrí hace ya 5 años , cuando debido a una grave enfermedad tuve que dejar el trabajo , la vida , el frnético ritmo de las horas para quedarme solo en una cama . Y allí estabas tú amigo Juan , me acompañastes , me arropastes , me distes fuerza y ánimo en las largas noches de insomio , de desazón y de inquietud.
Ya recuperado sólo puedo decir GRACIAS JUAN , GRACIAS DE CORAZON , por tí soy mejor padre , mejor persona … soy ROSAVENTERO

UN PLACER OIRTE
UN PLACER DESCUBRIR
UN PLACER APRENDER
UN PLACER QUERERTE
UN PLACER DORMIR

Según la Real Academia de la Lengua:
Esperanza:Estado del ánimo en el cual se nos presenta como posible lo que deseamos.

Aún recuerdo la congoja que invadía mi alma hace ya dos años…Un estado de ánimo tan frustrante como desconocido para mi:Nunca antes había sentido algo así por alguien a quien ni tan siquiera conocía.No acababa de entenderlo,pero poco a poco tomé conciencia de que esos años escuchándote,esas noches arrullado por tu conocimiento,habían tejido un vínculo indestructible entre nosotros.

Por eso sentí tu marcha.

Y por eso ese dolor dió paso a la esperanza.A la esperanza de que algún día volveremos a encontrarnos en algún sitio,junto a otros,para formar,quizás,estrellas…..

Seguimos escuchando la Rosa,claro,porque aunque no estás delante del micrófono,seguro que la escuchas de vez en cuando,y como bien sabes lo están haciendo muy bien…..

FUERZA Y HONOR , siempre.

A todo el equipo de LRV, gracias, mil gracias. No es solamente un programa de radio, es más, mucho más. Se ha convertido con los años en una liturgia muy espacial: un rato de paz, una compañía entrañable, algo que no se puede explicar pero que existe, como tantas cosas tan trascendentales.
El trabajo, la vida, la obra de Cebri no podía desaparecer sin más.
Juan Antonio, somos legión quienes no te olvidamos, te queremos.

Kaixo.

Lo mio no son las palabras la verdad, no se hacer unas frases tan bonitas como las q aquí hay, lo mios es hacer formas con globos. El 14 sep 2009 hice una figura de spiderman y se la dedique a tu hijo Alejandro.

Parte 1

http://www.youtube.com/watch?v=RTT2ZcN9Na0

Parte 2

http://www.youtube.com/watch?v=ZRu6mlyk_Tw

Como podéis ver estaba nervioso al dedicar el vídeo ( la de tomas q hice, pensando que igual algún día lo veíais….pero al final lo conseguí )

Todos mis vídeos, 202 y un total de 1328617 Reproducciones de vídeo en 1 año y 2 meses.

http://www.youtube.com/user/felixyoldi#g/u

Os animo q entréis en este mundo de la globoflexia, el cual yo enseño a la gente y como no yo cogí de ejemplo el de Juan Antonio con sus Pasajes de la Historia que me hicieron descubrir el maravilloso mundo de la historia y también de la RADIO.

Nunca le conocí personalmente, no tuve esa oportunidad. Pero como muchas otras personas, fuí conectando con su alma a través de tantos años de escucharle, de beneficiarme de su sabiduría, de su entusiasmo, de su bondad.. hasta llegar a ser para mí, alguien muy querido, profundamente querido.
Su partida, tan de repente, tan inesperada, siendo tan joven, me dejó una pena muy grande.
¡qué suerte haberte “conocido” Juan Antonio! Eres un ser humano maravilloso… !

Cuando uno pretende describir magia es una sensación que en ocasiones no necesita palabras, solo eso, sentirla, algo de lo que Cebri es y sera un genio entre los genios, alguien con la capacidad de hacer algo complicado o difícil en algo tierno y hermoso a la vez.

Viajar por los recuerdos en La Rosa de los Vientos llevaría a miles de anécdotas, a la cual mas curiosa o destacada, con un denominador común, la capacidad de sentirse identificado con esa sensación llena de magia y encanto que la envuelve.

A pesar del tiempo, ahí sigue delante de nuestros sentidos para poder disfrutarla por tiempo indefinido, ademas como tu bien sabes Cebri, algún día, mas tarde o mas temprano, volverás y entonces un nuevo soplo de brisa fresca recorrerá el momento que ahora muchos vivimos y por el cual nos hacer sentir contentos y felices como una lombrices.

Los navegantes de la antigüedad llegaban a la ciudad de Alejandria, donde se recogía todo el saber de la humanidad en su enorme biblioteca, guiados por la luz de su enorme faro. Durante muchos años recogiste el testigo dicho faro y en las largas noches, nos diste el rumbo a ese puerto que es la Rosa de los Vientos donde aún hoy podemos cargar en nuestras bodegas cientos de pergaminos con la historia de miles de años de civilización. Gracias Juan Antonio, tu leyenda sigue viva.

Javier

Juan Antonio Cebria,

Agradezco mucho el tiempo y la dedicación que dedicaste cuando estuviste entre nosotros para dejar en notas y tu voz el conocimiento de los sucesos de un pasado remoto así como tu opinión muy progresista en muchas casos respecto a los sucesos contemporneos.

Agradezco mucho a tu familia el tiempo que te dio para dedicar a todos nosotros y aún más, a aquellos que aún no han nacido y se interesarán por la historia gracias a tu voz y a tus libros.

La mentaría solamente el no haber tenido la oportunidad de decirte esto en persona fundido en un abrazo sincero.

Hasta siempre mi Cebri, que no sabes la veces que he repetido en mi carro el CD que me hice con tus pasajes, que no yo lo sé.

Mi más sincero reconocimiento a aquel que tuvo la generosidad de hablarme desde el otro lado del Atlantico acerca de mis raices hispanas.

Lloré el 20, horas… el 20 de hace 2 años….sigo llorando …y cada vez que le oigo lloro y siento la paz que solo su voz me ha dado nunca nadie, es una sensacion que estoy seguro que conoceis…como explicar el bien..el amor..la paz..la ternura y la fuerza que susuraban sus palabras…como explicar el folio infinito que llenaria con elogios…lloraré el 20 que viene…

Estoy seguro que no seré el único, y que será repetitivo, pero no se como agradecerte lo que hiciste. Gracias a ti empecé a leer libros, cosa que no hacia desde el instituto, e incluso me planteo el estudiar una carrera a mis 35 años. Como sabrás siempre te estaré agradecido. Hasta pronto.

Solo se me ocurren dos palabras para homenajearte “GRACIAS MAESTRO”, por todas las horas que nos acompañaste y por todo lo que nos enseñaste. Tu recuerdo permanecera siempre entre nosotros porque , cual Cid Campeador, ganaste tu batalla despues de muerto y la continuidad de “tu Rosa”, con Silvia al frente, es la mejor prueba de ello.
Hasta siempre CEBRI

¡Oh!, Capitán, mi capitán,
que con pulso firme y horizonte lejano,
nos vienes guiando, a través del proceloso espacio,
de los treinta y dos rumbos, de tu Rosa de los Vientos.

Gracias.
Y Gracias, a todos vosotros.

Hace dos años que tu voz se apago pero nació un espíritu que hizo que naciera una forma de ver las cosas diferentes, un espíritu que ilumina la forma de ver la historia, la imaginación, de como tenemos que cuidar nuestro planeta y de la forma que me cambio mis pensamientos y forma de vida.Te añoro cada fin de semana, pero tu espíritu me ilumina, nos ilumina a todos aquellos que hemos crecido contigo por todo GRACIAS.
Me despido con un lema que toda aquella gente que te admira hemos hecho nuestro FUERZA Y HONOR.

POSDATA : Gracias Silvia por seguir con su legado, a Bruno por ser como es, a Carlos y Jesúsr por ser profesores del saber, a Fray Ignacio por deleitarnos con su música Martín que no cambie nunca, a Escribano que grande es el cine!!, a Fernando no hay secreto que se resista . Gracias a todos y fuerte abrazo a Alejandro.

Dos años se cumplen de la muerte de mi Padre tan solo 13 dias antes de la tuya Juan Antonio.
Dos años que a la pena de que mi padre no pudiera ser testigo de mi boda, tan solo una semana despues de su muerte, se sumaba la de tu desaparicion. Fue un Octubre de 2007 que jamas olvidare por los sentimientos agridulces que sentí.
He tardado en sobreponerme y poder escuchar tu sintonia del programa, que ahora llevo en el movil para cuando llaman mis amigos.
Hoy me he acordado de ti quisiera mandarte el saludo y el abrazo que me hubiera gustado darte en vida, y pedirte que le cuentes a mi padre esos pasajes de la historia que tanto me gustaban y que el por su enfermedad no pudo escuchar. Dile que le quiero y que cuido de mama, que intentare seguir adelante como él y tu me enseñasteis con Fuerza y Honor.

Gracias a los dos

Una vez en un Foro alguien pregunto si teniamos miedo a morir, destino implacable al cual nos diriigimos un poco al final de cada día.
Unos respondian que si, otros que a medias, pero al final se llego a la conclusión de que si bien es imposible evitar la visita de la Parca, lo ideal seria conseguir que tu vida haya sido plena. Que tu vida haya servido para algo, tanto para ti, como para los demás. JAC lo consiguio. Consiguio que la obra de su vida fuera total, puesto que a fuerza de tenacidad, constancia, inteligencia, caracter, llego a donde llegan muy pocos.
Y creo algo que sólo consiguen los locos o los genios, que los demás creyeramos en su proyecto: LA ROSA DE LOS VIENTOS. Sé que una muerte en la familia es muy dolorosa, el dolor que se siente es inhumano, desgarrador, pero su familia debe sentirse orgullosa de que la vida de JAC, que duró lo que duró (siempre es más breve de lo que deseamos), fue plena y consiguio lo que quizás no consiguimos la mayoría.

Fuerza y Honor

Carlos es mi hermano, que se fue a jugar con las estrellas, como tu estarás haciendo ahora, hace ya 12 años. Dale las gracias por comentarme cierto dia que existía un programa los fines de semana que estaba muy bien y que iba sobre cosas que a mi me interesaban. Bendito ese dia en el que te conocí y se abrió esa amistad y esa complicidad que solo la radio de la noche puede trabar.

Muchas gracias Cebri, por hacerme mejor persona es y a sido un honor y un privilegio tener un maestro como tu.

Fuerza y Honor

P.D.: Hablalé a Carlos sobre la resistencia de Numancia, que es su pasaje favorito.

Querido Cebri:
Hace dos años que cruzaste más allá de las estrellas para no regresar. Aunque todavía estamos tristes por tu marcha, hemos intentando sobreponernos, como tu hacias todas las noches con unas palabras de ánimo.
Nos has dado multitud de lecciones, como el amar y la pasión por lo que te gusta -en tu caso fue la historia- , o el estar constantemente con todos los sentidos abiertos porque en cualquier lugar se puede aprender, o el querer puede ser poder.
Pero, sobre todo, gracias a tus libros y tus programas de radio te has hecho inmortal en nuestros corazones. Y es difícil que no pase una semana sin que escuche tu voz.
Dicen que los correos electrónicos dan la vuelta al mundo. Espero que todos los que se te envían estos días te lleguen allá donde estés.
Alquien que te admiró, te admira y te admirará. ¡Fuerza y Honor!
Xavi (Xixón)

Conocí la Rosa de los vientos una semana después de la muerte de Juan Antonio.

Desde entonces he escuchado muchas, muchas horas, primero de monográficos y pasajes, y luego horas de programas enteros.
Aunque no sé si eso es conocer a una persona. No sé si los sentimientos y recuerdos son tan auténticos como los de los que oyeron y sintieron en directo.

Ahora es raro ver la foto de alguien que ya no estaba aquí cuando lo conocí. Y verlo como alguien cercano y querido. Es raro incluso pensar que, a mi modo, lo conozco.

Y en medio de estos recuerdos, que no sé si son recuerdos, y estos sentimientos que no sé si son sentimientos, hay una sensación que sí se que es agradable.
Cuando oigo un viejo programa siento que me hacen un regalo valioso. Y sigo sintiéndolo hoy.

Tardé mucho en escuchar el programa en que se anunciaba su muerte. Es impresionante ver que trabajo tan bueno hizo que logró sobrevivir a su arrolladora presencia.

Al oir la voz de Juan Antonio y su equipo sólo puedo pensar ¡gracias!

De Turno de Noche a La Rosa de los Vientos, esa rosa de los vientos que creaste, que amaste y nos hiciste amar a miles de personas en España y millones en todo el mundo, La Rosa de los Vientos, la guía de nuestras vidas, un claro ejemplo de superacion en la vida y de que hay que luchar por lo que uno cré vive y le gusta .Me acuerdo cuando fichasteis al “ser más corrupto de la radio española” y os poniais los tres: tú, Silvia y Martín a contar la agenda cultural, y os visualizaba como una pequeña familia. Quería tambien culparte del gran sentido del humor que tenías y que me has pegado a traves de los monográficos, de los lugares de poder con fray que solo salía de su cueva para visitar lugares misticos, esas carcajadas que me he tenido que aguantar en esas lindas noches que me has hecho pasar.Por último, desde ese fatídico sábado, me tomo la muerte como pasaporte hacia otra vida, ya que cuando llegue mi hora te encontraré a tí encantado y feliz como una lombriz. Gracias por existir.

Gracias por ser luz en las noches que las sombras de mi alma adueñarse querian,por ser la voz amiga que me hacia y hace viajar a traves de la historia,del misterio,de los sueños,de la busqueda del conocimiento.Gracias Gran Capitan.

Pasa el tiempo, pero tu sigues presente .Te recordamos cada dia escuchando el programa que tan bien creaste.Por cierto a mi me gusta escucha tu voz en programa.

Mi pequeño homenaje:
br>http://www.youtube.com/watch?v=JnOCkwkdAgA

Fuerza y Honor.

Que podría decir de Juan Antonio…
A él le debo mis viajes nocturnos sin salir de casa.
Viaje con Marco Polo o Alejandro Magno en sus conquistas. Observe a Alexander Fleming o Madame Curie en su laboratorio, cuando realizaron sus descubrimientos. Presencié el hundimiento del Bismarck o la Armada Invencible.
Llegué a sentirme participe de las batallas y aventuras que narraba.
Su sentido del humor y esa sensación de conocerlo de siempre sin haberlo conocido en persona.
Su obra debe permanecer en el tiempo de la mano de la Rosa y de todos los que la formamos.
Un tremendísimo abrazo a Silvia, Alejandro y a todo el equipo.
Fuerza y Honor!

Mi querido Cebri:
Durante más de siete años tu voz alumbró mi camino, mi vida. Hace ya dos que te perdimos, pero sigues siendo mi luz. Sigues iluminando mis días. Me impregnas con tu tesón, tu entusiasmo, tu optimismo, tu alegría. Eres mi maestro, mi ejemplo a seguir. Me marcas el rumbo, cual rosa de los vientos.
Por todo ello, eternamente, gracias.

El 20 de Octubre de 2007, me metí en la cama dispuesto a empezar a escuchar el programa , sintonizé onda cero y una voz despedía a un compañero, un amigo y no se cuantas cosas más. No podía ser, se referían a Juan. Intentaba digerir lo que intuía que había escuchado, mientras un locutor destrozado, ponía música para rellenar el tiempo de La Rosa. Ese día era el cumpleaños de mi padre. Hace unos días también lo perdí.
Un abrazo muy fuerte para todos, especialmente para Silvia y Alejandro. FUERZA Y HONOR

La Rosa de los Vientos sigue señalando los 32 rumbos que Juan Antonio Cebrián nos enseñó a amar, pero hay uno, aquel en el que confluyen los otros 32, sobre el que gira la Rosa, que se apagó el 20 de octubre de 2007. Es el punto de Juan Antonio Cebrián, el punto Maestro.

Te echamos de menos, Maestro.

Mónica Tris

Eres una leyenda, si no te hubiera conocido no creeria que pudiera haber gente como tu,integro, culto, humano, sensible, en definitiva el lider al que siempre tendre como ejemplo, un abrazo para toda la familia de La Rosa de los Vientos, y quedo a tus ordenes Mi Capitan, mi querido Juan Antonio Cebrian.

Juan Antonio era diestro en muchas cosas y para nosotros, para los que eramos sus amigos desconocidos, era especialmente bueno transmitiendo ilusiónes. Ilusión por la vida, esperanza en el futuro, ilusiones instantáneas como eran sus Pasajes de la Historia… esos en los que, como si fuéramos grandes cineastas, construíamos elaboradas escenas en nuestra mente, cuando en realidad él hacía el trabajo duro despertando en todos sus oyentes esa perezosa capacidad de imaginar que tenemos latente. Y todo con incansable bondad y generosidad como sólo los grandes hacen.

Siento nostagial, se te hecha de menos, solo decirte que el dia que me toque dejar este mundo, esperame pues si con alguien deseo pasar la eternidad es con los mios y contigo Juan, no vemos simpre tuyo un MURCIELAGO

No se como explicar este sentimiento de vacio
No se como andar sin la luz que me alumbro en mi camino
Descubrí la junventud contigo,
maduré contigo,
me casé contigo,
mi flor mi niña vino contigo,
Y ahora, ¿ quien guiara mi destino?
Si Dios existe y esta disfrutando de tu compañía,
dile por favor que no nos deje sin tu sabiduría
Dile que necesimos tu guía,
dile….
mejor no, por que se a ciencia cierta que tu no nos dejaras sin tu presencia
en cada uno de nuestros días
Te añoramos Cebrían ,
no uno ni dos sino un mar de almas que se guían con el rumbo de tu ROSA
ROSA de los Vientos
Diosa de la sabiduría

( No es muy bueno pero es lo que siento y es para ti Juan Antonio)

Escribo estas líneas para resaltar un poco más, si cabe, la figura de este gran genio que ha hecho que ame la historia cada día más.
Comencé a escuchar el programa hace ya más o menos 11 años, en plena adolescencia.

He de deciros que he crecido y madurado mucho siempre con vuestra grata compañía, con la voz siempre inseparable de mi queridísimo Juan y con sus gratas contestaciones por e mail a todas las cuestiones que de vez en cuando os he ido planteando a lo largo de todos estos años.

Todavía, después de dos años me asombra no escuchar su voz una vez termina de sonar esa canción que alegra mis días y que da comienzo al maravilloso programa que ha creado.
Todavía le echo de menos cada vez que vuelvo a escuchar el programa.

Realmente no sé que puedo escribir que no haya leido y compartido con cada letra escrita hacia este locutor de radio que era mucho más, un visionario fuera de su tiempo que dió a la radio otro nivel, otro sabor, otro estilo…
Sólo puedo decir que has significado y significarás siempre mucho en mi vida, porque has formado parte de ella como cualquiera de mis amigos o de mi familia noche tras noche.
Y sólo puedo intentar siempre estar “feliz como una lombriz” frase que después de escucharla he hecho mia y recordarte con una sonrisa de oreja a oreja.

¡Fuerza y honor!

Eran arte las palabras
Cuando salian de tu boca
Y hechizaban,
Creando mágicas obras
Que navegando en las ondas
Se quedaban.

Fuiste guardian de las noches
Cuando el sueño no llegaba
A la espera
De oir de Morfeo las voces,
O hasta que la luz del alba
Floreciera.

Lo prometido, cumplido.

Se fue el maestro su alma sigue viva en nuestro recuerdo, el día 20 de Octubre es su segundo aniversario, y su legión de amigos estará presente con un homenaje.

Si deseas unirte, entra en la Asociación de Juan Antonio Cebrián.

Él se fue, se fue el maestro de las ondas,

del misterio, de la ciencia y la historia,

maestro de la comunicación, del saber,

del entretenimiento y el buen hacer.


Hoy os hablo de una Leyenda, de un gran hombre,

de un maestro, de un gran amigo aún siendo desconocido,

Juan Antonio Cebrián está presente siempre en el corazón,

en los sentimientos, en la forma de ver y enfocar la vida,

en los pensamientos, es ya parte de una Leyenda.


Se fue el maestro, pero sigue su alma dando anhelo

en las noches de bohemia, recordando su ilusión,

nació con su adiós una leyenda,

fue una realidad, todo un misterio.


La noche huele a Cebrián, la historia se ligó a Juan, el capitán,

formando una tempestad que contaba el saber del pasado,

la conquista de nuestro presente y el futuro de la humanidad.


El se fue sin saber que se iba, nosotros sabemos que se fue,

se fue sin irse, nunca nos dejó, al llegar la madrugada aparece,

vuelve cada noche feliz como una lombriz alimentado los sueños

con su transparente deseo de humanidad que lo dice todo.


La historia fue siempre la misma, nunca cambió,

siempre aburrida y tostón, el maestro que hoy es leyenda,

primero con la palabra y después con la letra impresa,

revivió la historia, la hizo divertida, alegre, emocionante.


Cuándo cada noche su voz aparecía

era siempre una alegría,

hoy recordando el aniversario

de tu triste y conmocionado adiós

las lagrimas fluyen de la mente

mojando de recuerdos al oyente

porque amigo Cebrián,

tú, tú siempre estarás presente.


http://senovilla-poemario.blogspot.com/2009/10/la-leyenda-del-maestro.html

Este es del año pasado, luego os envio el de este año.


Una noche fue cuando me enteré que ya nos dejabas de narrar,

que tu corazón había dejado de sonar

se te rompió estando de celebración

sin darte cuenta nos distes un adiós.


Si amigo, así fue como me enteré

de que te habías ido siendo feliz

igual que una lombriz,

porque eras hombre encantado

de ser capaz de a todos mostrar

esos treinta y dos rumbos

que aún sigo buscando

que aún voy encontrando.


Y es que aquella noche fue

cuando por un amigo lloré

sin haber conversado nunca con él.

Simplemente te recuerdo emocionado

consciente de que un año ha pasado

y que tus amigos te seguimos, hermanados,

son muchos los que sienten en su ser

que son Rosaventeros enganchados

a tu Ejercito de amigos que nunca te traicionaron.


Una vez cuando esa tarde llovía,

pensé ¿Qué es lo que me quedaría?.


Hoy lo sé con la certeza de un año vivido

sin la compañía de tu buen hacer

sin el ejemplo de seguir buscando el Azul y Verde

sin tu lucha constante por el saber

sin tu cachondeo con tus compañeros

sin tu seriedad con lo trascendente

sin tu ironía con lo trivial, ¿Quién lo diría?

Ha pasado un largo año sin tenerte en la radio

sin leer un nuevo libro publicado,

si es que te fuiste sin saber que te ibas.


Ha pasado un año ya, y te doy una alegría

tu Rosa de los Vientos sigue viva

es un árbol que sigue luchando entre el Azul y Verde

allí está tu viuda, una gran mujer

siguen tus amigos mostrándonos el saber

de vez en cuando tienen cachondeo, esos tus compañeros

que siguen siendo serios en lo trascendente

mostrando la ironía de como pasa la vida.


Acá me encuentro hoy, recordando que hace un año

este mi amigo se fue sin avisar que se iba,

una tarde más de intensa lluvia me hace recordar

que tengo aún mucho que aprender

que me queda mucho con lo que soñar

que por siempre he de luchar por encontrar

esos treinta y dos rumbos que me quiso mostrar.


Fuerza y Honor gran lema de batalla para un Templario

del siglo XX, que el día veinte hará ya un año que se fue

sin decir adiós, sin contarnos que se iba.

Te mando una oración amiga,

te envío buenas noticias que serán bien recibidas,

tu familia arropada por tus compañeros y amigos,

¿Sabes? tienen una Asociación con tu nombre CEBRIAN,

tu programa sigue precedido por la fama

lo acompaña enlazado tu nombre JUAN ANTONIO

el Bosque sigue creciendo, sembrado con corazones

que allí plantaron un lugar Azul y Verde deseado

los Rosaventeros siguen tus rumbos, siguen siendo legiones

y yo aquí escribiendo y contando como ha pasado este año.


Me despido amigo mío, habiendo dejado escrito

lo que tú me enseñaste

y que es lo importante,

haga lo que haga,

diga lo que diga,

piense lo que piense

siempre estará conmigo la Fuerza y el Honor

que me inculcaste, así como una despedida amable

con esos mis famosos Saludos Cordiales.

http://senovilla-poemario.blogspot.com/2009/04/se-fue-el-maestro.html

Parece imposible, querido Juan, que hayan pasado dos años. Y supongo que si parece imposible es porque, tras el durísimo golpe, la sorpresa y la incredulidad, sencillamente no te hemos dejado ir. Espero que lo entiendas y que puedas perdonar nuestra osadía. Nos negamos a perderte. Contigo aprendimos, reímos a carcajadas en horas intempestivas, nos emocionamos hasta las lágrimas. Tú eras, y serás siempre, la voz de nuestras noches. Porque muchos, como yo misma, ya no sabemos dormir sin tu caricia en nuestros oídos. Y porque, gracias a las pequeñas magias modernas, podemos rescatarte a voluntad, traerte de vuelta y recordar siempre. Donde quiera que estés, Maestro, has de saber que tu Rosa de los Vientos sigue guiando nuestros pasos. La imbatible firmeza de tus Caballeros y tu Dama nos acompaña y nos llena de Fuerza y Honor. Somos tu legado, querido Juan, y esa certeza es la que mantiene intacto el lazo que nos une y nos hace llevadera esta orfandad. Tuyos para siempre y hasta que llegue el reencuentro.

Leticia.
Gijón.

Nunca pensé que podría sentir como propio a un extraño total. Nunca hablé contigo, pero siempre me sentí escuchada y comprendida por tí. Nunca me dejaste tu hombro para que soltara mis penas, pero en cada viaje me susurrabas palabras al oído que tranquilizaban mi alma. Nunca me estrechaste en un abrazo amigo, pero tu voz me rodeaba como un cálido acurrucamiento. Nunca nos vimos, pero siempre que te escuchaba tenía presente tu imagen sonriente. Nunca podré olvidarte porque nunca fuiste un extraño.

si, mi amigo, asi lo siento, desde que hace ya la friolera de (realmente no se los años), comence siendo un murcielago a su lado, con sombrita y compañia, para mi fue el gran descubrimiento de mi vida, y me ha acompañado durante todos esos años, me he sentido muy especial a su lado, y eso es grandioso, formando parte de algo trascendente. Ya hace dos años, y todavía siento una punzada en el corazón cuando escucho su voz, que reconozco es a menudo, pues a través de todo lo que he podido ir recopilando, sigo escuchandole, nunca podre agradecer bastante a este hombre todas las horas tan gratificantes. Es mi maestro, mi amigo, mi capitan. Me siento muy orgullosa de haberle descubierto en sus inicios, no me he perdido nada. Reconozco que lo añoro muchisimo y que lo único que me compensa, en parte, es que la rosa sigue, con silvia, carlos, jesus, bruno, juan ignacio, rafa, martin, fernando, a los que tanto quiero y admiro, y a toda esa gente que somos los rosaventeros. Gracias cebri, amigo, estaras conmigo siempre. NACHA.-

Recuerdo, como si hubiera sido ayer mismo, la primera vez que escuche “La rosa de los vientos”. Me costaba dormir, trataba de buscar el sueño dando vueltas al dial, y de repente… escuche una musica… casi embrujadora. El presentador daba la bienvenida a un programa. Poco sabia yo que en aquel preciso instante, Juan Antonio Cebrian me estaba abriendo las puertas de un mundo que se llamaba “La rosa de los vientos”. Despues vinieron horas de escucha, grabaciones, libros, descargas… tambien el durisimo golpe de la partida de nuestro querido capitan. Aunque tambien la espernza y la certeza de que los que te suceden en el puesto, sin duda estan y estaran a la altura.
Solo puedo decir gracias, por hacerme sentir uno de los vuestros

Mi homenaje a Juan Antonio es corto pero sincero.
No me olvido de ti maestro, pues tus lecciones todavía las sigo aprendiendo de ti y de tus muchos alumnos.

José Antonio Blasco García.

Querido, añorado y ausente, tan presente Juan Antonio.

Te echo de menos, de ti hablo a todos los que puedo,
de tu voz, de tu humor. De tu visión del mundo con los ojos del alma y el corazón. De tu sabiduría, tu coraje.
br>Por lo que nos diste y nos dejaste. Por hacer de muchos, de nosotros los rosaventeros, una gran familia.

Por eso… eternamente gracias.

José Manuel.

Ya no marcas las horas de nuestras noches con tus historias de ensueño, con tus consejos de padre, con tus bromas de genio.

Esa noche de hace dos años te esperaba, pero no llegaba el momento, una dura corazonada lo convirtió todo en tormento.

Ya no marcas las horas de nuestras noches con tus historias de ensueño, con tus consejos de padre, con tus bromas de genio.

Se anuncia tu marcha y el corazón se me heló, las ondas que circulaban por el ambiente, estaban impregnadas de unas lagrimas de dolor.

Ya no marcas las horas de nuestras noches con tus historias de ensueño, con tus consejos de padre, con tus bromas de genio.

Y con el tiempo la herida no cura, al escuchar tú voz, se vuelve más dura.

Pero consuela el saber, que como yo, miles de personas sienten la Fuerza y Honor que tú, maestro Cebrián nos has inculcado.

Ya no marcas las horas de nuestras noches con tus historias de ensueño, con tus consejos de padre, con tus bromas de genio.

Pero por siempre estarás en nuestro recuerdo, nos has enseñado a vivir algo nuevo y tus enseñanzas perdurarán en el tiempo.

Aunque ya no marques las horas de nuestras noches con tus historias de ensueño, con tus consejos de padre, con tus bromas de genio.

En mi vida,aparte de la familia directa, ha habido 3 muertes de tres seres que me han marcado como si se hubiera muerto una parte de mi:el primero fue el payaso Fofo, el segundo fue Félix Rodriguez de la Fuente y el tercero ha sido Juan Antonio.
Cuando las palabras no pueden describir los sentimientos lo mejor es el silencio.
Te sigo echando de menos Juan Antonio.Fuerza y honor.

Querido Juan: Ya va para dos años que te fuiste y más de quince que tuve el privilegio de empezar a escucharte. Te mando estas palabras a Onda cielo como dice Fernando para darte las gracias por todo lo que me has dado a mí y a miles de personas durante todos estos años.Quería que supieras el inmenso orgullo y honor que supone formar parte de “tu vida”,de pertenecer a la gran familia de La Rosa de los Vientos . Ten la certeza de que la” hoguera de nuestra tribu humana” siempre se mantendrá viva con la luz que desprenden seres como tú.
Gracias y mil veces gracias amigo mio.¡Cuanto te echo de menos!. fmdo: Juan Cazorla
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“Este libro está dedicado con toda justicia a la mejor audiencia y equipo que un programa de radio pudo soñar jamás.Por vosotros La Rosa de los Vientos mantendrá bien alto el estandarte del ideal que nos conduzca a un mundo mejor.Recordad que lo que hacemos en la tierra tiene su eco en la eternidad”.

FUERZA Y HONOR.
Juan Antonio Cebrián.(LA CRUZADA DEL SUR).

“Este libro está dedicado a una musa que lo ha hecho realidad. Sin su luz,constancia y cariño nada hubiese sido posible. Por ella, y para ella, como todas las cosas de mi vida. Mi querida, mi amada, mi esposa Silvia.

Juan Antonio Cebrián.(PASAJES DE LA HISTORIA)

“Este libro está dedicado a mi hijo Alejandro, futuro guerrero de la paz y defensor de la tolerancia y armonía entre los pueblos. Él y los de su generación serán los depositarios de los mejores valores humanos que nos harán avanzar a pesar de todo este brumoso siglo XXI. Ésa es mi esperanza.”

Juan Antonio Cebrián.(LA AVENTURA DE LOS ROMANOS EN HISPANIA).

Te fuiste el pasado 20 de Octubre de 2007, en una hora que nunca debió existir.

No sé porque te escuché tanto, pero me afané a buscar en la red de redes tus pasajes de la historia, las grabaciones de los programas y me gustaba tener esa “colección” que ampliaba de vez en cuando. Aunque nada como escucharte en directo por la radio aunque fuese tarde. Gozaba mientras me acompañabas en mi casa, en mi coche, siempre me hacías de copiloto.

Ojalá hubiese tenido ocasión de escucharte más días, de haberte escuchado antes de lo que lo hice, ahora no hay tiempo para eso ya que desgraciadamente no podré escucharte de nuevo en directo.
Esa voz que ha acompañado a tantas generaciones, esa voz que ha unido a gente distinta de edad, de gustos. Has unido a gente que aunque no lo sepa, tiene algo en común. He amado esa voz cálida y cercana, una voz que Alejandro disfrutó, era la voz de un padre que nos contaba “cosas” para evitar que nos durmiésemos o precisamente para que nos durmiésemos. Una voz que estaba ahí y que se ha ido.

Nos has hecho amar la historia, amar los misterios y la noche. Nos has dado tanto sin pedir nada a cambio que, siento que te debo algo. Y no puedo darte más que una sincera despedida, no puedo darte más que decirte que te recordaré. No puedo darte más que estas simples líneas

Quiero transcribir algo que dijiste en ese programa recuerdo que creo, que es emocionante:”Llega el momento de la despedida, el momento de pasar a la clandestinidad momentánea. No sabemos cuanto, no sé cuanto, semanas, meses no lo sé pero si os aseguro que volveré y nos haremos notar, os lo aseguro (…). Veremos donde acabamos, pero lo que si os aseguro es que siempre luciremos orgullosos la bandera de la Rosa de los Vientos. Esa, que nos hizo ser como somos, la que nos enseñó tanto, los 32 rumbos posibles permanecen inalterados, de momento hay que bogar con rumbo incierto. Pero jamás, jamás, podrán borrar el recuerdo de un programa que se hizo gracias a la entrega, al entusiasmo de miles de personas, que se sintieron especiales escuchándolo, sintieron que ese era su programa, que formaba parte de sus familias, de sus corazones, ese es el orgullo, ese es el legado, esa es la historia que yo me llevo(…)Fuerza y Honor, Gloria eterna a la Rosa de los Vientos”

Escuchándolo hoy, siento que era la mejor despedida que nos pudiste dar aunque no lo sabíamos nadie, creo que es la lección postrera que hoy aprendí una vez el maestro se fue. Y debo darte las gracias por ese legado, por formar parte de mí. Si, bogaremos con rumbo incierto, pero los rosaventeros no podremos olvidarte.

Debo despedirme del todo y solo desearte un muy buen viaje allá donde la Reina Victoria te conceda esa medalla anhelada de Caballero del Imperio británico y allá donde puedas hablar con aquellos a quienes tanto admiraste, seguro que el Magno te estará esperando.
Yo por mi parte, te seguiré escuchando, te seguiré recordando, te fuiste como los buenos, y nos dejas muchas cosas buenas. Gracias por todo, un abrazo y un beso enorme a tu familia y cuídales desde donde estés, estoy seguro de que lo harás.

Nos vemos Maestro. Allá donde estés serás feliz como una lombriz. Fuerza y Honor.

por mostrarnos el mundo,siempre fuerza y honor
por viajar a traves del tiempo,siempre fuerza y honor
por brindar conocimiento,siempre fuerza y honor
por navegar por los misterios,siempre fuerza y honor
por enseñarnos a dudar,siempre fuerza y honor
por aportarnos mas artes,siempre fuerza y honor
por desvelarnos trapos sucios,siempre fuerza y honor
por inyectarnos esperanza,siempre fuerza y honor
32 rumbos distintos se que nos depara el viento,las espinas de esta rosa solo son conocimiento y me siento un ser unico y priviligiado por ser uno de los muchachos que lucho junto alejandro magno.he navegado entre los misterios del mundo del vudu,vi al emperador rendirse tras perder en waterloo.he descubierto los secretos que guardaba ali-bey y vi rodar la cabeza de luis capeto cuamdo dejo de ser rey.vi a escipion vencer a anibal en la batalla de zama y alesia caer ante cesar tras la derrota gala.cada dia en la inopia mueren varios genios,fui el padrino de gala y ataulfo en la villa de ingenio.aulle como un lobo junto a mi rey leonidas haciendo frente a jerjes para pasar las termopilas.he visto cosas increibles sin ser el señor millon y estube en las catacumbas escapando de neron.marco antonio y julio cesar pelearon por mi,fui la ultima ptolomeo que cai bajo una aspid.fui crucificado en villa apia junto a espartaco,el turno de noche es mi favorito de trabajo
32 rumbos distintos se que me depara el viento,las espinas de esta rosa solo son conocimiento,se que hay una estrella que guia en el firmamento,tuve mil profesores pero solo un maestro.fui un trovador en la corte de leonor,fui el leon que hizo frente al zote de dios,me dañaron las radiaciones de madam curie y conoci al señor de todos los oceanos ,se llamaba temujin.corte las cadenas de la tienda de miramamolin y recupere jerusalen junto a mi señor salahadin.fui una viñeta perdida en el noveno arte,intente desvelar los misterios de marte.via socrates discutir con su mujer xantipa,una nave tamaño autobus me abdujo junto a sombrita,tocando un guitarron sin darse importancia,fui un indio defendido por bartolome d elas casas.desde la española fui el primero que vi a colon y guardo el mejor cine escondido en un cajon.de robert peter hansel pude esquivar sus balas y longsan me decapito junto a william wallace.intente terciar entre thomas more y enrique VIII,estube con santa ana disparando en el alamo.aguante en cartajena junto a blas de lezo y fui el grumete en trafalgar del almirante nelson.cada vez esta mas negro lo que era azul y verde,enseñaste que la esperanza es lo ultimo que se pierde,cuantas cosas aportastes,cuantas cosas por ti se,que un estudio de radio es un lugar de poder.nunca enseñaste historia,junto a ti la he vivido,sin conocerte te considero mi amigo.32 rumbos distintos nos depara el nuevo viento,florece con nosotros rosas con espinas de conocimiento
por haber amado a clio,siempre fuerza y honor
por convertirnos en tu tribu,siempre fuerza y honor
por ayudarnos a comprender,siempre fuerza y honor
por amar a mama gaia,siempre fuerza y honor
por presentarnos a los grandes,siempre fuerza y honor
por mantener nuestra hogera,siempre fuerza y honor
por aprender junto a nosotros,siempre fuerza y honor
por inyectarnos esperanza,siempre fuerza y honor
32 rumbos distintos nos depara el nuevo viento
florece con nosotros rosas con espinas de conocimiento
tenemos una estrella que guia en el firmamento
tube 1000 profesores pero solo un maestro

despues del rap de la zona cero este es mi homenaje al gran cebri (con musica suena mejor)intentare que martin lo cuelge en su blogalla donde estes maestro siempre FUERZA & HONOR

Juan Antonio, fuiste desde el principio una persona que causastes un gran impacto en mi, desde que empece a escucharte, en el verano del 2000, en principio por las cosas que contabas, y por como las contabas, pues sin duda eres el mejor divulgador que he escuchado.

Con el paso de los programas y del tiempo, no demasiado, te convertiste en algo mas, un amigo, un amigo en las ondas, y eso que en ese momento tan solo conocia tu voz y que tenias un bigote y “un aire a Tom Selleck”, pero ¿como no sentirse conectado a alguien como tu?. Una persona buena y que disfrutaba haciendo feliz a las personas, con gran sentido del humor, con una forma envidiable de afrontar la vida, una persona con las ideas y los principios muy claros.

No pude llegar a conocerte en persona y es algo que lamento, me tendre que conformar con un par de correos electronicos, leidos y contestados en antena y que me causaron gran emocion.

Hace casi dos años de aquel fatidico dia, en el que te tuve presente, ya que estaba disfrutando de una aficion comun que teniamos, Heroes del Silencio en concierto y por supuesto pensando en como escuchando el programa, se me pasaria mas rapido el tiempo a la vuelta de Sevilla a Granada, ¡que equivocado estaba…!

Desde aquel dia no he dejado de echarte de menos.

Sirvan estos emocionados renglones, torpemente escritos de humilde homenaje a tu persona, a esa maravillosa presencia, a esa voz que tantas madrugadas ha llenado mi dormitorio de sabiduria, conocimiento, sonrisas, carcajadas en ocasiones, curiosidad, pero sobre todo de calor y alegria, sin duda me has enriquecido como persona.

¡Fuerza y Honor!

Mi querido Cebrián, fue una madrugada cuando fuiste cómplice de mi gran amor. Se llamaba Mata Hary, mi primer pasaje de la historia. Una holandesita que descubrió en Java sus raíces. Luego conocí los monográficos, grandes misterios de la humanidad. Conocí la tertulia zona cero y a Fernando Rueda que salía airoso de tus trampas. Todos estos sentimientos se comprimen para terminar en una sola emoción; tu amistad. Porque fuiste mi amigo en las madrugadas, pero estaba equivocado, con el tiempo me di cuenta de que eras mi hermano. Aquel al que todos queremos emular. No solo fue tu programa, cada vez que te vía, o te escuchaba en una entrevista tus sentimientos y palabras se resumían en humildad y humanidad. Encontré en ti eso que llevamos dentro, sabemos que está ahí pero no quiere salir. Ese algo lo transformé en palabras, mi afición a escribir relatos. Encontré en mi interior la humanidad que nos hace ser mejor personas. Encontré en mi interior, tu fuerza y honor, nuestra fuerza y honor que tantos años compartimos. Gracias por ser mi amigo, mi hermano, mi alter ego.
Una gran tertulia se emite en las estrellas; Fernando Jiménez del Oso, Germán de Argumosa y Juan Antonio Cebrián. Fueron tantas pérdidas en un breve espacio de tiempo, que irónicamente me viene a la mente los monográficos sobre las maldiciones. No creo que fuese una maldición, fueron los Dioses, que desde su posición no recibían bien las ondas y decidieron llevaros a vuestro lado. Dioses egoístas que nos privaron de tu compañía. Dentro de mucho tiempo estaremos con ellos en las estrellas y les preguntaremos a esos Dioses “Por qué”.
Mientras no tengamos una respuesta seguiremos escuchando tu programa que dirige la que fue tu alter ego-Silvia Casasola. No tienes por qué preocuparte. Ella, Bruno, Callejo, Canales, Fernando, Ecribano, Raúl, Martín, Juan Ignacio y nuevos colaboradores lo están haciendo de maravilla.
Un día encendí la radio y en tu rosa de los vientos encontré mi destino.
Fuerza y honor hermano mío.

Soy Goyo, no soy ningun buen escritor ni tengo ninguna carrera universitaria , pero lo que si tengo son unas inmensas ganas de expresar el aprecio y el cariño que te tengo mi querido Cebri. En este segundo aniversario de tu marcha, está casi todo dicho. Eras un gran hombre, un gran humanista, un delicioso escritor y un gran divulgador. Te sigo teniendo en mi corazón y en cada evento que nos volvemos a reunir todos los rosaventeros me sigo emocionando y se me escapa alguna lágrima, no me cuesta expresarlo. Cuando miro al cielo por la noche, aún te creo ver ahí cerca del cinturón de Orión, al lado de esa espada , como no. No creo en otra vida más allá , aunque me gustaría creer solo por poder estrechar tu mano de nuevo con esa fuerza que tú solo transmites. Nada más , muchas gracias por todo lo que me diste, FUERZA Y HONOR.

Para mi Juan Antonio Cebrián era como ese hermano mayor que te guía, enseña y aconseja, cuando lo necesitas y siempre con acierto.
Yo crecí con él. No importaba a qué hora de la noche Juan Antonio se pusiese al micrófono, yo le escucharía. Cómo era posible que hubiese un programa en el que todos mis intereses se viesen reflejados?? la Rosa de los Vientos es mi mejor momento de la semana, los libros de Juan Antonio yde sus colaboradores son las estrellas de mi biblioteca.
Cuando se fue Juan Antonio me sentí como si algo dentro de mi se hubiese ido para siempre también. No podía ser cierto, era injusto. Podía Dios llevarse al mejor comunicador de la radio española?
Si, podía, porque a Dios también le gusta la radio, y decidió tener a su derecha a Juan Antonio Cebrián con toda su memoria histórica y toda su bondad. Y de alguna manera su espíritu ha quedado entre todos nosotros, al menos hasta que nos reunamos con él para darle las gracias en persona por todo.
Y Dios ha sido piadoso, animando a la Rosa de los Vientos a seguir adelante, y a fe que es tan especial para mi como lo ha sido siempre.
Mantiene toda su fuerza y todo su interés, y por eso os doy las gracias, y por eso sé que Juan Antonio, desde arriba, sonríe complacido porque en el fondo todo sigue igual.

Gracias a todo el equipo de La Rosa de los Vientos.

Siempre fiel.

Jorge

Me dura la tristeza, no puedo evitarlo. Hay tanta mediocridad, tanta paja, tantos días inservibles por la ausencia de magos o magos sin sonrisa. ¡Qué tristeza Juan Antonio!, no tenerte en pasajes nuevos, en tertulias de cuatro ces… Siempre albergué la esperanza de saludarte en persona y darte las gracias y decirte que fuiste mi Maestro con la única pretensión de recibir tu apretón de manos a modo de nombramiento de caballero rosaventero, o mejor, a modo de amigo, pues eso llegaste a ser para mí. A veces, como ahora, me niego a aceptar que no estés, lloro desconsoladamente y recurro a una grabación, entrevista o libro tuyo para consolarme y convencerme de que morir no es nada… Pero, como te decía, me dura la tristeza, ¡no puedo evitarlo!
Maestro, mago de sonrisa limpia, amigo, si supieras cuánto te echo de menos!

Para mi, como para todo el que lo oía en la radio o tuvo la suerte de conocerlo en persona fue un auténtico mazazo la noticia de su marcha. Nos dejó huérfanos de su bondad, de su sabiduría, de su buen hacer, de su mágia… Tenía tantas cualidades que me resulta difícil destacar una sola, pero si tuviese que hacerlo, tal vez lo resumiría en el título: “Un ser humano excepcional”.

Ahora estoy leyendo su biografía y el hacerlo ha significado apreciarlo todavía más de lo que ya lo apreciaba. He descubierto su coraje, su fuerza de voluntad, cómo a pesar de las dificultades siempre tenía un buen gesto, como siempre continuaba en la brecha.

Para mi Juan Antonio es mi maestro, es el modelo a seguir, es mi inspiración en la vida. Todos los que lo hemos conocido hemos cambiado, esto seguro de que todos somos mejores personas gracias a él.

Yo no creo que las casualidades, como muchos otros pienso que todo tiene un motivo de ser para bien o para mal. Viene a mi memoria el final de Blade Runner, cuando el replicante dice algo así como que la llama que brilla con más fuerza se apaga antes. A veces he pensado que Juan Antonio brilló con tanta luz que su vida se consumió en la mitad de tiempo, o tal vez fue lo contrario, tuvo que hacer lo que hizo en tan poco tiempo por que desgraciadamente no se le concedió más tiempo para estar aquí.

Un abrazo querido Juan Antonio, espero volver a verte cuando llege mi hora, allá donde estés.

Ahora tengo treinta años. Desde que tengo conciencia la rosa de los vientos y en particular Juan Antonio Cebrían forman parte de mi vida. Mi música es el mejor regalo que puedo ofrecerle.

Recuerdo que “El Jefe” decía en una canción:”el Taj Mahal, Las Pirámides de Egipto eran únicos, supuse, pero cuando te hicieron hermano, el molde se rompió”.

Y es que amigo mío, nadie más te puede igualar, tal vez sea por eso que estas allí donde solo los virtuosos/as están.

Te digo esto porque ayer, como en otras ocasiones, me volviste a hablar y a enseñarme algo más sobre nuestra amada Clio.

Te preguntaras el por qué, pues bien, pues resulta que ayer escuche por primera vez tu pasaje de la historia sobre Sócrates y sentí como si estuvieras todavía aquí.

Quería decirte que me llego al alma aquel acto final en que Sócrates bebía la infame cicuta junto a sus discípulos, sentí esa sensación que tuve cuando supe cómo te fuiste, aquella impotencia y pesadumbre que se adueña de uno ante una sentencia que no debería de haber sido, y pienso que frases nos hubieras dicho para aplacar nuestros desolados corazones por tu partida.

Quisiera preguntarte por aquello que tal vez este vedado a nuestros ojo o nuestras mentes: sobre que hay más allá de las puertas de Tannhauser, sobre si en las puertas el Nirvana Miguel Ángel hizo su gran obra magna, y tantas cosas que quisiera preguntarte.

Si supieras lo que aquí seguimos echando de menos aquella forma tuya de ver la vida y aquella voz cálida que por las noches nos ayudaba a dormir o a pensar que no estábamos solos en el mundo.

Tal vez, algún día la diosa Fortuna me brinde la oportunidad de conocerte en persona en otro lugar y pueda a volver a deleitarme con más pasajes tuyos.

Para terminar, quiero que sepas una cosa donde quiera que estés, aquí la semilla que plantaste crece cada día más fuerte, gracias a tus discípulos que han hecho una escuela en tu ejemplo de virtud.

Quiero despedirme de ti con aquel grito de guerra que nos dejaste:

FUERZA Y HONOR, Amigo mío

Junto a tu voz cada madrugada,
Una de esas noches no fue así,
Algo me dejó helada,
No escuché tu voz cálida.
Alguien decía que ya no estabas,
No podía creerlo,
Tenía que ser una broma pesada,
O una pesadilla malvada.
No saldrían más palabras de tu boca,
Infinidad de pasajes por narrar,
Océano sin capitán,
Tu luz me seguirá guiando.
Eterna será tu maestría,
Excepcional tu valentía,
Con Fuerza y
Honor uno de tus lemas.
Orador de sabiduría,
Dibujante de historias,
Eterno en el tiempo,
Maestro, amigo y genio.
Escucharte fue un privilegio,
No conocerte, una espina clavada,
Oculto en el firmamento,
Seguro que algún día nos encontraremos.

El sonido del silencio

Durante los primeros días de esta extraña enfermedad que aún me acompaña, sentí como la impotencia me atenazaba doblemente.
Una; porque mi cuerpo no me respondía. La otra, porque había gente que se iba. Y yo no podía hacer nada.
Gente que se iba en silencio. Gente a la que podía haber tocado con mis manos antes de irse. Y no lo hice. Y gente a la que nunca hubiera podido tocar con mis manos. La distancia me lo impedía.
Y aquel día, no recuerdo la hora. Mi impotencia me atenazaba aun más.
Solo me quedaba la distancia. Y el tiempo era el cable al que asirme.
Las ondas de la radio, las olas en las que subirme para ver lo mas alto posible. Y ver si podía otear un poco desde arriba.
Me quedaba el recuerdo de su voz. Y su voz me acompañó durante largas horas. Pero era una voz interior. Una voz que salía de mí.
El eco de su voz se expandía en mi cabeza. Y los recuerdos se enlazaban con esa voz.
Mi impotencia crecía. Porque mi mente no podía ponerle imagen. Y la tecnología me la dio. Busqué y busqué hasta encontrarla. Y se hizo la luz. Conseguí ordenar aquella cadena de eslabones desperdigados por mi mente. Y aquel día pasó a tener noche. Y la noche se convirtió en recuerdos de voz y de imagen.
Y todo ello tenía un nombre: Cebrian.
Sentía como todo transcurría en silencio. Tal como había empezado. Porque todo empezó así. Con un fuerte golpe “silencioso”. Ese es el golpe que se siente cuando los otros se van en silencio. Y todo me decía que esa forma de partir, es solo para los grandes. Y que los que nos quedábamos aquí, nos quedábamos condenados a recordar la grandeza, rodeados de lo minúsculos que somos.
Todo me decía que ellos, los grandes, se van así; en silencio. Para que desde la distancia veamos su grandeza. Y para que reflexionemos.
Para que reflexionemos por no haberlo hecho antes, mientras le podíamos tocar y rozar con la punta de nuestros dedos.
Así, desde la distancia, se ve mejor el gigante de espíritu. Por eso es por lo que nos quedamos aquí. Para contemplar la grandeza de su espíritu. Ese es el legado de los grandes. Eso es lo que nos dejan. Por eso la partida es silenciosa. Todos se van en silencio, como Cebrian.
Todos dejan ese momento de impotencia, que en mi caso se hacia cruel y doloroso. Mi cuerpo no me respondía, no me acompañaba. Y tenia que luchar con aquella marea interior que golpeaba mis sienes divagando entre recuerdos de noches silenciosas, donde hasta la caída de las estrellas se percibe en lo hondo de la noche.
Yo he aprendido a escuchar en silencio el ruido de los pasos de aquellos que eligen esa forma de partir.

A Juan Antonio Cebrian

Son pocos los momentos en los que la sincronía entre el ser humano, las vidas y el universo dediden quedar a la misma hora para mirarse las caras y entenderse mutuamente. Para ello, se necesitan interprétes que sean capaces de poner en conjunción estos elementos logrando traducir a unos y a otros sus anhelos, luchas, y vicisitudes. Es entonces, en cualquier noche de cualquier día, cuando las almohadas reposan ojos hiératicos y puños cerrados que se encuentran guerreando codo con codo junto a William Wallace, chicas que regresan de una velada de cigarrillos y alcohol incomprendida, en su descanso de saber que existe una Leonor de Aquitania que las hubiera protegido en su corte. Batallas personales con las que Sofía, ama de casa, se reconfortaba esos nocturnos fines de semana en los que la sociedad brama no sabe qué. A las tres de la madrugada de un molesto Sábado, los ojos y puños, las chicas y Sofía, sabían el porqué de su existencia.
Gracias Juan Antonio por los minutos de sincronicidad brindados, contigo todo estaba en orden.

Ver a U2 en el camp nou 65 euros

Leerte un buen libro 20 euros

Cenar con tu chica en un restaurante 130 euros

Disfrutar aprendiendo todos los fines de semana no tiene precio.

Gracias Juan Antonio de hacer de mi una persona mejor.